

Secciones
Servicios
Destacamos
Pilar M. Maciá
Jueves, 4 de febrero 2016, 01:53
Controlar y auditar los contratos que en la actualidad el Ayuntamiento mantiene con empresas concesionarias y tender a su desaparición en beneficio de lo público son dos de los objetivos del grupo municipal Cambiemos Orihuela, cuyo portavoz, Karlos Bernabé, anunció ayer que llevará a Pleno dos proposiciones encaminadas a este fin y que supondrán, en el caso de salir adelante, la puesta en marcha de una comisión que audite los contratos de servicios que en la actualidad prestan empresas externas al Ayuntamiento. El edil apostó por un cambio en el modelo de desarrollo económico porque «el marco de austeridad en el que estamos hace imposible una gestión pública razonable» y precisó que municipios como Orihuela «se ven obligados a subcontratar servicios con empresas». Bernabé distinguió en este punto entre los autónomos y pequeños empresarios «que hacen de vez en cuando trabajos para el Ayuntamiento y que más bien sufren a la administración local» y grandes corporaciones a las que a su juicio se trata demasiado bien «y que nos desangran», lo que calificó de «marxismo, pero del de Groucho Marx».
En este sentido recordó las sentencias recientemente conocidas mediante las que hay que pagar facturas de hace años a Colsur, la situación del deporte en Orihuela Costa, donde el Ayuntamiento tiene que aportar una cantidad extraordinaria cada año a la contrata que cobra, según el portavoz de Cambiemos, precios «abusivos» por unos servicios que son municipales, o el ya famoso caso de Esma Park, la concesionaria de la ORA que no pagó en seis años ni un euro de lo que debía aportar a las arcas públicas, y que acabó el pasado mes de noviembre su contrato con una deuda al Ayuntamiento que ronda el medio millón de euros.
En contraposición a esto planteó algo que tiene previsto hablar con el resto de formaciones políticas con representación municipal en una doble proposición que se pretende llevar en parte al Pleno del mes de febrero, con la intención de agilizar la puesta en marcha de una comisión informativa no permanente que audite los contratos que estén en vigor, y una segunda parte cuya realización requeriría de más tiempo y que supondría una modificación del Reglamento Orgánico Municipal (ROM) para crear una comisión de control y vigilancia de los contratos públicos. Bernabé aseguró que no es nada nuevo, porque reglamentos de ciudades como Madrid o Zaragoza ya lo contemplan, y abogó por su puesta en marcha en Orihuela.
El edil relató que normalmente su formación recoge quejas anónimas de ciudadanos que no están contentos con determinados servicios y de trabajadores que tampoco, «y siempre están en el fuego cruzado, porque la empresa siempre gana por encima de trabajadores y ciudadanos». De este modo relató que la comisión permitiría a la gente saber qué pasa con estos contratos así como garantizar los derechos de los empleados, «y que a la vez se elabore un proyecto para recuperar servicios por parte del municipio».
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.