Fernando Amat
Sábado, 13 de febrero 2016, 01:15
El grupo municipal del PP exige al alcalde de Cox, Miguel Ángel Gambín, que ordene la demolición de la casa de campo que ha levantado su suegro en el último mes sin licencia. El grupo en la oposición se ha querido personar en el expediente sancionador para que el Ayuntamiento identifique a todos los trabajadores que operan todavía en la construcción ubicada en plena huerta de la localidad. En este sentido, esperan una respuesta inmediata del gobierno local para que paralice los trabajos ya que existe un expediente que investiga la infracción urbanística.
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El PP reclama al primer edil que frene las obras ilegales de su suegro ya que «según la legislación urbanística valenciana es el alcalde quien tiene la competencia de dar la orden de paralización y precintado de la misma», señaló ayer el portavoz popular, Antonio Bernabeu. La oposición considera que una vez que se precintan «tiene que dar la orden de derribo a su suegro», y añaden que «si no cumple debe poner multas coercitivas mensuales para que se restaure la legalidad urbanística».
La formación popular entiende que «el alcalde ya era conocedor de que se construía este inmueble porque era muy comentado en Cox». En este sentido califican de «escándalo de que a diario Gambín visitase una obra de la cual disfrutará en un futuro sobre suelo rústico no urbanizable». Así lo corroboraron los vecinos de bancal que señalan la presencia del alcalde de Ciudadanos en la huerta cojense casi a diario. Además, el PP ha anunciado que va a poner en conocimiento de la Conselleria de Vertebración del Territorio la ilegalidad para que adopte las medidas pertinentes. El PP valora que «el alcalde solo ha actuado cuando la situación de la obra ya era escandalosa. De haberlo hecho antes, se hubiera ahorrado muchos problemas y una situación muy desagradable». Por ello, insiste en que para dar ejemplo «ahora debe cumplir de forma estricta la legalidad y hacerla cumplir también a su suegro».
Por su parte, los socios de gobierno del PSOE y Compromís aceptaron la denuncia tramitada por el primer edil en contra de su familiar político. El portavoz del PSOE, Francisco Cámara, dijo que «ha tomado una decisión por muy mal que le viniera». En cuanto a la edil de Compromís, Beatriz Nadal, valoró que «ojalá se hubieran producido actuaciones de este estilo en casos anteriores».
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