P. M. M.
Jueves, 24 de marzo 2016, 01:38
Cuando aún no había terminado Nuestro Padre Jesús de cruzar el Rabaloche y se empezaban a escuchar por la calle los compases de los pasacalles de las cofradías de la procesión de la noche, un enlutado cortejo salía de la iglesia del Monasterio de San Juan de la Penitencia para dar escolta a las imágenes que el sábado por la tarde tomarán parte en la procesión del Santo Entierro de Cristo, organizada por el Ayuntamiento desde su origen en el siglo XVII.
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Despacio, avanzaron por la calle Alfonso XIII para tomar Mayor y llegar a la iglesia de las Santas Justa y Rufina, donde las imágenes permanecerán hasta su próxima salida en la que se les incorporará La Diablesa de Nicolás de Bussy. San Juan Evangelista abrió la procesión arropado por los cofrades del Ecce Homo, quienes además son los encargados de llevarlo en andas. Por detrás las fiestas de Moros y Cristianos mientras que el grupo de Cantores de la Primitiva Pasión Federico Rogel interpretaba 'Stabat Mater' por detrás del Cristo Yacente de Séiquer Zanón en urna de Balaguer.
La Soledad, acompañada por sus pilares cerró una procesión que presidió la Corporación encabezada por el alcalde, Emilio Bascuñana, quien estuvo acompañado por el Caballero Cubierto y también presidente de la Hermandad de Los Pilares de La Soledad, Tomás Sáez, el Síndico del Oriol, Francisco Giménes Ávila y el intendente de la Policía Local José María Pomares.
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