Altruismo en lucha contra las enfermedades

La Glorieta se convirtió ayer por la mañana en un punto de encuentro para cerca de una veintena de entidades que trabajan en el ámbito sociosanitario gracias a la llamada que hizo la Concejalía de Sanidad que dirige la edil Noelia Grao para que las asociaciones no gubernamentales expusieran el trabajo que realizan, cada una en su campo, tanto con enfermos como con los familiares de estos.

La primera jornada de asociaciones de este tipo que celebra el municipio «y que nace con vocación de ser una cita anual», precisó la responsable municipal, reunió a Ongs de todas las parcelas sanitarias, desde aquellas que trabajan con menores discapacitados como Adis o personas con enfermedades mentales como Adiem a otras que ofrecen apoyo a pacientes oncológicos, diabéticos, drogodependientes, celíacos, personas que han sufrido daños cerebrales como ictus o las que se ocupan de personas afectadas por la esclerosis múltiple.

Tampoco faltaron a la cita desde ginmasios locales que brindaron sus servicios y amenizaron la mañana con exhibiciones de zumba o especialistas de Quirónsalud. Asimismo estuvieron presentes el Colegio Profesional de Ópticos y el de fisioterapeutas o también los voluntarios de Cruz Roja para enseñar en sus expositores el trabajo que hacen tanto en el área de juventud con sus programas para niños en riesgo de exclusión social o sus tareas en el campo de los primeros cuidados. No faltaron tampoco los talleres montados por Recicla Alicante, entidad que tiene en marcha hasta 26 proyectos desde educativos a medioambientales con escolares y que colabora con Adiem o Renacer, dedicada a erradicar drogodepencias «porque de lo que se trata es de que la gente conozca nuestros proyectos y que estamos para apoyar a todo el que requiera ayuda», indico su presidente, Mauricio García Jorquera.

Grao se mostró convencida de que la cita «sirve no solo para difundir entre los ciudadanos la encomiable labor que desempeñan puesto que también ha servido para que intercambien puntos de vista y puedan surgir proyectos de colaboración entre ellas».

La concejal de Sanidad agradeció la implicación de todas las asociaciones presentes y dijo ser consciente de la importancia que tiene «el soporte que dan a enfermos y a sus familias más allá de las competencias que tienen las administraciones». La responsable municipal añadió que también con la primera feria de esta clase «queremos que los vecinos sepan que se pueden asociar a ellas porque en muchas de las ocasiones las subvenciones con las que cuentan no permiten que desarrollen todas sus iniciativas» y apeló a la solidaridad de los oriolanos para que colaboren con ellas.

La cita fue precisamente eso, un escaparate donde cada una aportó su encomiable trabajo social como el que realiza Praxis Vega Baja con menores en la prevención de la salud. Su responsable, Abraham Fernández, destacó «que de citas como estas sale el trabajo en red que es indispensable porque muchas veces nuestro campo de actuación es complementario». Así el colectivo preparó gincanas saludables en las que alertó de los riesgos de las drogas o la necesidad de apostar por la prevención en la sexualidad. También muy activa fue la presencia de Adis, la asociación que hace semanas abrió en la calle Arriba un centro de día para personas con discapacidades psíquicas y que ofrece servicios especializados a estos como la unidad de respiro de fines de semana a familias que tienen a su cargo a un menor, tarea que desempeñan sus voluntarios. En este mismo ámbito Adiem, que trabaja con enfermos mentales, promocionó Inicia, el centro especial de empleo para personas con minusvalía psíquica en las que se da trabajo a este colectivo.

También tuvo gran afluencia de asistentes el expositor preparado por la Asociación de Diabéticos de Orihuela y Comarca (Adoc) que realizó pruebas de glucosa o tensión a personas de edad avanzada porque «esta enfermedad es muy grave cuando se detecta en mayores por los riesgos que entraña para la salud», explicó una de sus responsables, Vicky Berná.

Casi todos los responsables de las Ong presentes coincidieron en el mismo diagnóstico como es la necesidad «de hacer visible el trabajo en todos los ámbitos porque nadie está exento de padecer alguna dolencia o tener familiares que la padezcan», declaró Rosa Aracil, presidenta de Acervega, que se dedica a dar soporte a personas con problemas cerebrales adquiridos como consecuencia de ataques isquémicos o accidentes. La entidad, con sede en Daya Vieja, agrupa a 80 socios, y su responsable precisó que estos se dan cada vez en personas más jóvenes.

Uno de los más reivindicativos fue el presidente de Aadem (Asociación de Afectados De Esclerosis Múltiple), José Tomás, y que agrupa a más de 600 socios. Este apeló porque se reconozca a los afectados por esta enfermedad degenerativa del sistema nervioso con el grado de minusvalía mínimo para recibir una prestación estatal «porque la Administración la sigue ignorando cuando síntomas como la fatiga crónica impide a los afectados desarrollar su trabajo en condiciones porque no siempre los síntomas son externos» pero apeló a que haya más citas como esta «para divulgar la labor que realizamos».