Ballester asume la Alcaldía de forma interina hasta culminar el relevo socialista el jueves

El Pleno de Albatera tomó ayer a mediodía conocimiento de la renuncia al cargo de alcaldesa de la socialista Rosa Guillén, quien ha culminado su parte del acuerdo de gobernabilidad de hace un año por el cual habría una rotación en el puesto con la representante de Unión Progreso y Democracia (UPyD), Rosario Ballester. Ella será quien ostente la máxima representación municipal en su faceta de primer edil pero de una forma efímera puesto que el jueves por la tarde tendrá lugar la sesión de investidura de esta como nueva máxima autoridad local.

Ballester, que lleva con esta seis legislaturas en el Consistorio, desde su pertenencia a Coalición Valenciana hasta ahora en la formación magenta, tendrá la vara de mando otros doce meses, hasta junio del 2017, y de nuevo el PSOE se alternará con ella para rematar la legislatura. Ambas formaciones cuentan con el apoyo de los dos concejales de Ciudadanos que aunque perciben un sueldo y colaboran en diversas áreas del gobierno local no están integrados de pleno derecho como tales en función de las directrices marcadas por C's a nivel nacional de garantizar la gobernabilidad pero sin estar incorporados.

La suma de fuerzas sacó del poder a un PP que logró ocho ediles y el gobierno local cuenta con el apoyo de la no adscrita y ex del PSOE Milagros Pérez, con lo cual el apoyo a Ballester está garantizado, hecho que confirmó esta ayer a 'La Verdad'. Por su parte tanto la alcaldesa saliente como Rosario Ballester y el portavoz de la formación naranja, Domingo Guillén, valoraron el relevo como fruto de un acuerdo «que sigue vigente por lo que seguiremos trabajando como hasta ahora y con normalidad». Por su parte el popular Federico Berná eludió hacer declaraciones hasta la toma de posesión de la nueva primer edil.