Eduard Fernández: «Deseo tener más personajes de este calibre»

Visto lo visto, el Goya de Eduard Fernández al mejor actor por 'Marco', la cinta dirigida por Aitor Arregi y Jon Garaño, era el único que anoche parecía estar cantado. Con él, el intérprete suma ya cuatro 'cabezones' y se queda a dos del actor más laureado en la historia de los premios, Javier Bardem.

Durante su encuentro con los periodistas tras la clausura de la gala, Fernández (Barcelona, 60 años) explicaba que su deseo, después de un año «tan maravilloso» como el que ha tenido -es también el protagonista de 'El 47', la película más galardonada de la noche, con cinco trofeos, entre ellos el de mejor película-, es «poder interpretar más personajes de este calibre, con directores muy buenos». «Eso es lo que más ilusión me haría», apuntó.

Pese a que todo el mundo le daba como ganador e incluso recibió el galardón de manos de su hija Greta Fernández -ella le dijo que iba a entregar otro premio-, Fernández dejó claro que no las tenía todas consigo: «Eso nunca se sabe, los nervios siempre están ahí».

Para meterse en la piel de Enric Marco, el impostor que durante años afirmó que había estado prisionero en un campo de concentración nazi, el actor, que parece disfrutar como un niño con los cambios físicos, tuvo que engordar dieciséis kilos. «Este es un personaje al que quiero mucho y es el más complejo al que me he enfrentado nunca», explicó. No en vano, cuando subió al escenario a recoger el galardón ya había dejado claro que construyendo al impostor «se me fue un poco la pinza, pero me lo pasé muy bien».

Después, sobre la histórica casualidad de que 'El 47' y 'La infiltrada' hayan compartido el premio más importante de la velada, aseguró que fue «una sorpresa». «En todo caso ha sido bonito y es una fiesta el pasar estas cosas en el cine y en la vida», concluyó.

• Temas
• Premios Goya