Niños y adultos, en un fin de semana especial en Vall de Nuria

Es una de las estaciones más coquetas de España. Destaca por encontrarse enclavada en un paisaje único, situada en el Pirineo Oriental, y disponer de una enorme riqueza natural. Esta espectacular montaña de Vall de Nuria se encuentra rodeada por picos de casi 3.000 metros, a la que se puede acceder a través del tren cremallera, el cual tiene un recorrido de algo más de 12 kilómetros.

A pesar de contar con únicamente 11 pistas de esquí alpino en sus instalaciones y 7,6 kilómetros de superficie esquiable, ofrece multitud de alternativas para todos los públicos. Especialmente lo hacen con los más pequeños, a través de su parque lúdico o el Cau de la Marmota. Precisamente allí tendrá lugar un espectáculo infantil durante el próximo domingo 28 de febrero.

La estación gerundense lo celebrará con los niños por todo lo alto, con diferentes talleres y premio al final de las actividades. Este lugar, habitualmente acostumbrado a recibir a pequeños de entre 4 y 10 años, ha organizado una gran fiesta en la que habrá concursos de máscaras y pinturas, y un divertido espectáculo infantil. Como fin de la cita, se ofrecerá una chocolatada para los asistentes.

Pero no solo podrá divertirse el público infantil, pues una de las actividades más habituales en Vall de Nuria son los bautismos con raquetas de nieve. Durante este fin de semana, como no podía ser de otra forma, se volverá a vivir de una manera muy especial. El 27 y 28 de febrero se podrá conocer el maravilloso entorno de la estación de la mano de guías experimentados.

Una nueva forma de descubrir el maravilloso entorno que rodea el centro invernal gerundense. La actividad, que se puede realizar a partir de los siete años de edad, es junto con el esquí de montaña, una de las especialidades de las que se pueden practicar durante más meses del año. Concretamente, suelen comenzar en el mes de noviembre, alargándose hasta junio, cuando aún se puede disfrutar algo de nieve.

Su objetivo es llegar a lugares insospechados, mágicos y solitarios. Dentro del propio complejo existen diferentes rutas para practicar estos deportes. Las excursiones, que tienen también clases de iniciación, pueden llegar a durar hasta nueve horas si se elige la alta montaña. Un enorme esfuerzo que por su belleza merecerá la pena.