Disfrutar de Grandvalira a 80 km/h

Sus más de 200 kilómetros de extensión esquiable y los últimos títulos conquistados como mejor estación del sur de Europa la convierten en, cuanto menos, uno de los destinos más interesantes para los amantes de los deportes de invierno. Situada a un paso de España, cada vez gana más adeptos dispuestos a disfrutar en sus pistas, que este año vive una temporada de ensueño.

Una más para Grandvalira, uno de los grandes resorts el de mayor longitud en el sur de Europa- que cada año ofrece nuevos conceptos para disfrutar rodeado de un paraje espectacular y montones de nieve. Entre sus actividades alternativas al esquí y al snowboard se encuentran algunas tan típicas como los paseos en motos de nieve o los cada vez más famosos trineos tirados por perros, denominado mushing.

Ideal para pasear por lugares únicos de la estación andorrana acompañado de familia, amigos e incluso solo en los circuitos con los que cuenta Grandvalira. Algo que también se encuentra disponible en el caso de las raquetas de nieve, todo un clásico en los centros de esquí cada temporada de invierno.

Volar a 40 metros de altura

Más demanda está teniendo sobre todo en el caso de los jóvenes- su moderna tirolina, situada en el Monte Mágico de Canillo. Tanto es así que por primera vez la actividad se mantendrá durante los meses de invierno, para que todos los usuarios que se acerquen a la estación puedan disfrutar también durante el periodo estival.

Buena parte de culpa la tiene la velocidad que se alcanza en su recorrido se llega a los 80 kilómetros por hora-, de 550 metros, que la convierte en la más larga de los Pirineos. Situada a 40 metros de altura no es apta para cardíacos, aunque supone una oportunidad para disfrutar de las mejores vistas sobre el lago Llac del Fom.

Esta actividad, en la que experimentar la adrenalina en plena naturaleza, es individual y únicamente se podrá realizar por parte de personas que superen los 35 kilos de peso y en ningún caso sobrepasen los 100. Una nueva manera de divertirse, porque en las estaciones no todo es esquí.