160 metros de caída al vacío

Existen personas que no le temen a las alturas o que disfrutan de las altas dosis de emoción y de las grandes descargas de adrenalina. Estas son capaces de lanzarse al vacío desde un avión, un puente, una montaña o desde un edificio. Solo imaginarlo da auténtico vértigo.

Esta acción está reconocida como deporte y son muchas las competiciones que se realizan para premiar el mejor salto con paracaídas. Además, las imágenes que dejan los participantes desde las alturas son de película, aunque solo aptas para aquellos que aguanten caída tras caída.

Estas instántaneas pueden observarse durante este fin de semana en la Comnitat, donde se disputa un evento deportivo de lo más extremo: la gran final del campeonato mundial de Salto BASE.

El paisaje escogido ha sido Benidorm, localidad costera valenciana caracterizada por sus altos edificios. Uno de estos es el que acogerá los saltos de los participantes que se disputan ganar la competición.

Desde lo más alto del Gran Hotel Bali, los saltadores se disputarán durante una caída de 160 metros ser el campeón de la doceava edición de la competición. El hotel de Benidorm es el punto final de un circuito que empezó en la Tirolina Valle de Tena de Hoz de Jaca con parada en el balcón de la Alameda de la ciudad de Ronda.

Los mejores saltadores del mundo, entre los que se encuentran tres españoles, se jugarán el oro al saltador más preciso y seguro. Para ello, el jurado valora determinados aspectos del salto.

La puntuación depende, en gran parte, del tiempo de caída libre. Este no puede superar los 3 segundos; de hacerlo así, los participantes quedarían automáticamente descalificados. El cálculo y la práctica hacen que el saltador sepa exactamente el momento ideal para accionar su paracaídas.

El cielo de Benidorm se llenará así, de las imágenes más vertiginosas de paracaidistas este fin de semana, para que los amantes de las emociones extremas puedan vivir los saltos como si ellos mismos fuesen los aspirantes.