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La mágica isla de Tabarca; entre piratas berberiscos y pescadores

Miércoles, 15 de julio 2020, 11:26

Tabarca es la única isla habitada de la Comunitat Valenciana, se encuentra frente a la ciudad de Alicante, a once millas náuticas, y cerca del cabo de Santa Pola. Este pequeño archipiélago, compuesto, además de Tabarca, por los islotes La Cantera, La Galera y la Nao, posee una longitud aproximada de 1.800 metros y una anchura máxima de unos 400 metros.

RC
Tabarca es la única isla habitada de la Comunitat Valenciana, se encuentra frente a la ciudad de Alicante, a once millas náuticas, y cerca del cabo de Santa Pola. Este pequeño archipiélago, compuesto, además de Tabarca, por los islotes La Cantera, La Galera y la Nao, posee una longitud aproximada de 1.800 metros y una anchura máxima de unos 400 metros.
Tabarca es la única isla habitada de la Comunitat Valenciana, se encuentra frente a la ciudad de Alicante, a once millas náuticas, y cerca del cabo de Santa Pola. Este pequeño archipiélago, compuesto, además de Tabarca, por los islotes La Cantera, La Galera y la Nao, posee una longitud aproximada de 1.800 metros y una anchura máxima de unos 400 metros.

Tabarca está llena de historia, pues sus costas albergaron en el pasado un refugio de piratas berberiscos. En el siglo XVIII, Carlos III ordenó fortificarla y levantar en ella un pueblo en el que alojar a varias familias de pescadores de Génova que estaban cautivos en la ciudad tunecina de Tabarka. Las murallas que rodean su núcleo urbano han sido declaradas Conjunto Histórico Artístico y Bien de Interés Cultural.

David Costa
Tabarca está llena de historia, pues sus costas albergaron en el pasado un refugio de piratas berberiscos. En el siglo XVIII, Carlos III ordenó fortificarla y levantar en ella un pueblo en el que alojar a varias familias de pescadores de Génova que estaban cautivos en la ciudad tunecina de Tabarka. Las murallas que rodean su núcleo urbano han sido declaradas Conjunto Histórico Artístico y Bien de Interés Cultural.
Tabarca está llena de historia, pues sus costas albergaron en el pasado un refugio de piratas berberiscos. En el siglo XVIII, Carlos III ordenó fortificarla y levantar en ella un pueblo en el que alojar a varias familias de pescadores de Génova que estaban cautivos en la ciudad tunecina de Tabarka. Las murallas que rodean su núcleo urbano han sido declaradas Conjunto Histórico Artístico y Bien de Interés Cultural.

En tiempos remotos, Tabarca recibía el nombre de Planesia y estaba despoblado y desolado: solo los piratas berberiscos lo utilizaban como punto avanzado en sus saqueos a la costa alicantina, por lo que se determinó su fortificación y posterior poblamiento.

Pixabay
En tiempos remotos, Tabarca recibía el nombre de Planesia y estaba despoblado y desolado: solo los piratas berberiscos lo utilizaban como punto avanzado en sus saqueos a la costa alicantina, por lo que se determinó su fortificación y posterior poblamiento.
En tiempos remotos, Tabarca recibía el nombre de Planesia y estaba despoblado y desolado: solo los piratas berberiscos lo utilizaban como punto avanzado en sus saqueos a la costa alicantina, por lo que se determinó su fortificación y posterior poblamiento.

En verano, la isla pasa de tener menos de 100 habitantes a miles y miles de turistas, atraídos por sus bellos rincones y naturaleza mediterránea.

Wikimedia
En verano, la isla pasa de tener menos de 100 habitantes a miles y miles de turistas, atraídos por sus bellos rincones y naturaleza mediterránea.
En verano, la isla pasa de tener menos de 100 habitantes a miles y miles de turistas, atraídos por sus bellos rincones y naturaleza mediterránea.

Con sus singularidades, Tabarca es uno de esos rincones costeros de personalidad solitaria donde hace mucho que se paró el tiempo.

David Costa
Con sus singularidades, Tabarca es uno de esos rincones costeros de personalidad solitaria donde hace mucho que se paró el tiempo.
Con sus singularidades, Tabarca es uno de esos rincones costeros de personalidad solitaria donde hace mucho que se paró el tiempo.

De entre sus particularidades destacan sus aguas turquesas y cristalinas, sus fondos marinos protegidos, su gastronomía marinera y sus callejuelas, que son pura inspiración viajera.

Roberto Milán
De entre sus particularidades destacan sus aguas turquesas y cristalinas, sus fondos marinos protegidos, su gastronomía marinera y sus callejuelas, que son pura inspiración viajera.
De entre sus particularidades destacan sus aguas turquesas y cristalinas, sus fondos marinos protegidos, su gastronomía marinera y sus callejuelas, que son pura inspiración viajera.

Tabarca es reconocida por la belleza de su litoral y sus aguas que invitan al baño. No en balde, sus playas han sido distinguidas continuamente con la bandera azul de la UE.

Carlos Rodríguez
Tabarca es reconocida por la belleza de su litoral y sus aguas que invitan al baño. No en balde, sus playas han sido distinguidas continuamente con la bandera azul de la UE.
Tabarca es reconocida por la belleza de su litoral y sus aguas que invitan al baño. No en balde, sus playas han sido distinguidas continuamente con la bandera azul de la UE.

La isla cuenta historias, siempre vinculadas con el mar, que han dejado huella en sus calles, monumentos y paisajes.

Roberto Milán
La isla cuenta historias, siempre vinculadas con el mar, que han dejado huella en sus calles, monumentos y paisajes.
La isla cuenta historias, siempre vinculadas con el mar, que han dejado huella en sus calles, monumentos y paisajes.

En función de la época del año, hay varios barcos diarios a Tabarca desde Santa Pola, Alicante, Guardamar del Segura o Benidorm, que tardan entre media hora y algo más de una hora en llegar, según cuál sea el puerto de embarque.

Fotolia
En función de la época del año, hay varios barcos diarios a Tabarca desde Santa Pola, Alicante, Guardamar del Segura o Benidorm, que tardan entre media hora y algo más de una hora en llegar, según cuál sea el puerto de embarque.
En función de la época del año, hay varios barcos diarios a Tabarca desde Santa Pola, Alicante, Guardamar del Segura o Benidorm, que tardan entre media hora y algo más de una hora en llegar, según cuál sea el puerto de embarque.

Al visitarla, el turista encontrará dos zonas diferenciadas: el pueblo fortificado, llamado San Pedro y San Pablo, donde se concentran las casas de la isla, y El Campo, un particular paisaje deshabitado con arbustos espinosos y matorrales que adquieren una forma muy característica, debido a los fuertes vientos del este que suelen azotar la isla.

David Costa
Al visitarla, el turista encontrará dos zonas diferenciadas: el pueblo fortificado, llamado San Pedro y San Pablo, donde se concentran las casas de la isla, y El Campo, un particular paisaje deshabitado con arbustos espinosos y matorrales que adquieren una forma muy característica, debido a los fuertes vientos del este que suelen azotar la isla.
Al visitarla, el turista encontrará dos zonas diferenciadas: el pueblo fortificado, llamado San Pedro y San Pablo, donde se concentran las casas de la isla, y El Campo, un particular paisaje deshabitado con arbustos espinosos y matorrales que adquieren una forma muy característica, debido a los fuertes vientos del este que suelen azotar la isla.

Su faro, uno de los lugares a visitar, fue construido en 1854 para evitar los naufragios que hasta entonces se producían con frecuencia.

Wikimedia
Su faro, uno de los lugares a visitar, fue construido en 1854 para evitar los naufragios que hasta entonces se producían con frecuencia.
Su faro, uno de los lugares a visitar, fue construido en 1854 para evitar los naufragios que hasta entonces se producían con frecuencia.

A pesar de su belleza, se dice que lo más impresionante de la isla está bajo el mar. O bien buceando o con las gafas de esnórquel, podrás nadar entre las frondosas praderas de posidonia, planta marina endémica del Mediterráneo, mientras te rodean meros o salmonetes.

Tono Balaguer
A pesar de su belleza, se dice que lo más impresionante de la isla está bajo el mar. O bien buceando o con las gafas de esnórquel, podrás nadar entre las frondosas praderas de posidonia, planta marina endémica del Mediterráneo, mientras te rodean meros o salmonetes.
A pesar de su belleza, se dice que lo más impresionante de la isla está bajo el mar. O bien buceando o con las gafas de esnórquel, podrás nadar entre las frondosas praderas de posidonia, planta marina endémica del Mediterráneo, mientras te rodean meros o salmonetes.

Además la visita a Tabarca permite disfrutar de la práctica de la vela, el windsurf o simplemente paseando por el litoral de la Isla.

Wikimedia
Además la visita a Tabarca permite disfrutar de la práctica de la vela, el windsurf o simplemente paseando por el litoral de la Isla.
Además la visita a Tabarca permite disfrutar de la práctica de la vela, el windsurf o simplemente paseando por el litoral de la Isla.

Vistas al mar, en Tabarca.

Roberto Milán
Vistas al mar, en Tabarca.
Vistas al mar, en Tabarca.

Calles de Tabarca.

Roberto Milán
Calles de Tabarca.
Calles de Tabarca.

Después de callejear, se puede llegar a la Iglesia de San Pedro y San Pablo: de estilo neoclásico pero con elementos de inspiración barroca. Fue construida en 1770.

Fotolia
Después de callejear, se puede llegar a la Iglesia de San Pedro y San Pablo: de estilo neoclásico pero con elementos de inspiración barroca. Fue construida en 1770.
Después de callejear, se puede llegar a la Iglesia de San Pedro y San Pablo: de estilo neoclásico pero con elementos de inspiración barroca. Fue construida en 1770.

Cuando cae la noche, Tabarca relaga uno de los mejores atardeceres de la costa en la Comunitat.

Flickr
Cuando cae la noche, Tabarca relaga uno de los mejores atardeceres de la costa en la Comunitat.
Cuando cae la noche, Tabarca relaga uno de los mejores atardeceres de la costa en la Comunitat.

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