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m. hortelano
Miércoles, 1 de abril 2020, 00:30
El turismo, tal y como lo conocíamos, ha quedado suspendido durante al menos un mes en nuestras vidas. En vacaciones de Semana Santa no visitaremos ningún punto de nuestra geografía cercana ni lejana, pero la tecnología nos permitirá ver algunos de los lugares que teníamos pensado descubrir las próximas semanas de Pascua.
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Y es que, aunque no pueda compararse con la experiencia de pasar unos días de descanso en cualquier destino, la tecnología nos abre ventanas a un mundo que se encuentra, actualmente, cerrado por confinamiento.
El portal oficial de Turismo Comunitat Valenciana cuenta con medio centenar de webcam que emiten en directo desde algunos de los lugares más icónicos de la geografía valenciana. Desde Morella a Pilar de la Horadada, pasando por la mayoría de playas de nuestra costa. Todas esas imágenes tienen ahora un denominador común: están vacías de turistas y viandantes, por lo que los monumentos, paseos y plazas lucen estampas totalmente distintas a las que nos tienen acostumbrados.
Por ejemplo, en la Explanada de Alicante, uno de los enclaves más transitados en la capital alicantina, con uno de los pavimentos más famosos de la Comunitat, no se ve ni un alma. Pero podemos obervar el devenir del día desde la webcam instalada en sus inmediaciones. Incluso los cambios de luz en su cielo mediterráneo.
También La Marina de Valencia y sus alrededores, donde los días de Pascua la playa de Las Arenas se llena de cometas, luce estos días vacía. Desde la cámara instalada en uno de los hoteles del paseo se puede ver la salida del sol desde el mar. O Calpe, uno de los paseos más transitados, permite ver preciosas puestas de sol al atardecer desde la webcam de su club náutico.
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En Castellón, las vistas del Castillo de Peñíscola, otro de los enclaves más solicitados para las vacaciones de Semana Santa, también se observa la quietud del paseo y del mar estos días.
Si, por contra, hubiéramos preferido un destino de interior para haber pasado nuestras vacaciones, también podemos ver ahora sus principales monumentos estos días. La plaza mayor de Ontinyent, la de Xàtiva, las murallas de Morella, o la impresionante plaza de España de Alcoi, donde en apenas un mes iban a celebrarse sus fiestas de Moros y Cristianos, también luce vacía.
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Aunque de momento se puedan visitar estos enclaves, la tecnología nos permite que desde casa podamos admirar estampas a las que no estamos acostumbrados, pero que son ya habituales en estas jornadas de cuarentena.
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