El granero valenciano se agota

El PP valenciano pesa menos. Y no es que se haya sometido a ningún tipo de dieta o de operación de cirugía. Los populares de la Comunitat representan mucho menos para el PP en su conjunto. Los datos del 25-M revelan una significativa caída del voto del partido que preside Alberto Fabra sobre la media de esta formación en el conjunto de España. Se sigue logrando mejores resultados que la media, es verdad. Pero la condición de gran granero de voto popular, de territorio que junto a la Comunidad de Madrid sostenía la fuerza popular en el conjunto del Estado, ha desaparecido.

El porcentaje de voto del PP en el conjunto del Estado alcanza el 26%. Una caída aparatosa, comparada con los 42,7 puntos logrados hace cinco años, que alcanza los 16,7 puntos. El batacazo en la Comunitat es todavía mayor. Del 52,8% de 2009 se pasa al 29% de esta cita, es decir, una caída cercana a los 24 puntos.

Pero la comparación clave no es tanto con el dato de hace cinco años como con el de la media nacional. Hace cinco años, el PP valenciano mejoró en 10,1 puntos los datos de la media nacional. Estaba recién estallado Gürtel, pero la maquinaria electoral de los populares de la Comunitat volvió a funcionar -después también lo haría en las autonómicas y municipales y en las generales de 2011-. Valencia y Madrid, tanto por número de voto como por porcentaje, eran la gran reserva de apoyo popular en el ámbito general.

En 2014, Valencia -y también Madrid- pierde esa condición de granero de voto popular. La diferencia del PP valenciano con la media lograda por los populares anoche es de sólo tres puntos. Es decir, el PP valenciano se deja siete puntos sobre la media nacional respecto al resultado de las últimas elecciones europeas. El dato contrasta con los resultados, en porcentaje, de otras autonomías. El PP de Murcia -otro granero tradicional de voto popular- logra un 37% de votos; Castilla-La Mancha y Castilla y León también alcanzan ese porcentaje. Extremadura y Galicia logran igualmente mejores datos que los populares valencianos.

El PP de la Comunitat tampoco sale bien parado de la comparación con los populares de Madrid. El otro granero tradicional de voto popular alcanzó en 2009 un porcentaje de voto del 49,1%. El dato del 25-M sitúa a los populares que preside Esperanza Aguirre en un 29,8%. Su caída es de 19,3 puntos (la del PP valenciano roza los 24). Si en 2009 el PP madrileño quedó 6,4 puntos por encima de la media nacional de su partido, en 2014 logran 3,8 puntos. De manera que su caída sobre la media nacional es de 2,6 puntos, frente a los 7 que se deja el PP nacional.

La diferencia que el PP valenciano obtiene sobre el PSPV, que pasa de los 14,8 puntos de hace cinco años a poco más de 7,5, también es muy inferior a las de otras autonomías en las que tradicionalmente la diferencia entre populares y socialistas era muy inferior a la que se obtenía en la Comunitat. En Murcia el PP gana por 17 puntos al PSOE, en Galicia por 14, igual que en Castilla y León; en Madrid gana por 11 y en Castilla-La Mancha por nueve.

A la abstención

Los datos del PP en la Comunitat revelan que la formación que preside Alberto Fabra se ha visto claramente afectada por la abstención. Los resultados obtenidos por UPyD, Ciudadanos y VOX, ni siquiera en el caso de que todos ellos fueran exvotantes del PP, justificarían los aproximadamente 475.000 sufragios perdidos por los populares en la Comunitat.

Las tres formaciones emergentes del centro-derecha logran en la Comunitat un total de 227.000 votos. De manera que, en el supuesto de que todos esos votos fueran hace cinco años del PP, a los populares todavía les faltarían otros 245.000 sufragios para repetir el resultado de hace cinco años. Alberto Fabra tiene previsto convocar esta misma semana a la Junta Directiva Regional de su partido para analizar los resultados logrados ayer.