Fabra se reivindica: «Tengo más ganas que nunca de ganar las elecciones»

El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, se reivindicó anoche como candidato a presidir la Generalitat Valenciana y «ganar las elecciones de 2015» en la cena de inicio de curso político de los populares celebrada en Castellón. Fabra, ante más de 1.000 afiliados, dijo sentirse «con más ganas que nunca y fuerza para ganar las próximas elecciones y ser el presidente de la mejor comunidad de España».

El actual líder regional dejó claro que la campaña electoral de las municipales y autonómicas comenzaba anoche y aprovechó para anunciar que Isabel Bonig va a ser la encargada de coordinar la campaña electoral que «debe explicar puerta a puerta» el «por qué el PP es la única opción viable» para gobernar la Comunitat.

La intervención de ayer sirvió para que la campaña arranque con orden y una estructura definida para engrasar la maquinaria que va a suponer el próximo año electoral. Fabra se reivindicó como líder de la formación y dejó claro que no hay alternativas posibles: Bonig será la coordinadora de su campaña y González Pons se brindó públicamente a «prestarte todo el apoyo que necesites».

Más contundente que en otras ocasiones, Fabra sacó músculo para manifestar que él es la única opción posible a presidir el PP de la Comunitat y ser candidato a la Generalitat, a la vez que vendió al PP como elemento clave de recuperación.

Momentos antes, Esteban González Pons, representante del PP nacional en el acto de anoche, conminaba a Fabra a dar un paso al frente: «Ahora te toca a ti, presidente, en todos los sentidos es tu turno», dijo Pons al acabar su intervención.

Los populares de la Comunitat aprovecharon la cena en Alqueries para sacar pecho de gestión realizada y el propio Fabra se reivindicó como el gestor que ha permitido que la Comunitat «cree empleo» y vuelva a ser «el motor de España».

Fabra quiso dejar claro que comenzaba una nueva etapa para el PP de la Comunitat. «Hemos sufrido mucho, hemos aguantado mucho, incluso insultos, quizá demasiado, pero siempre hemos dado la cara y nunca nos hemos escondido».

En este sentido, aseguró que «recae sobre nosotros mayor responsabilidad que en otras ocasiones porque son momentos complicados, pero sabemos cuál es la línea a seguir». El presidente añadió que se han tenido que tomar «medidas antipopulares, pero no había otra salida (...) Diagnosticamos el problema, qué había qué hacer pese al coste electoral y gracias a eso empezamos hoy a ver los frutos».

Recuperó además la reivindicación de un nuevo modelo de financiación que beneficie a la Comunitat. Así, el presidente de los populares valencianos aseguraba que los únicos que han defendido siempre esta mejora han sido los líderes del PP en Valencia.

El secretario de Ideas y Programas del PP, Esteban González Pons, animó a todos los alcaldes presentes, con Rita Barberá como principal baluarte del PP, a «seguir hablando el idioma de la calle» ya que «mientras hablemos el mismo idioma, la gente no nos fallará y todo lo demás, se puede resolver».

González Pons también puso de manifiesto que «tenemos que ganar porque si nosotros no ganamos, se puede parar la recuperación, si nosotros fallamos, a España le puede fallar el motor», a lo que añadió que «no podemos dejar que nos insulten, se burlen y quien gobierne aquí tiene que estar orgulloso de ser de Castellón, de Valencia y de Alicante».

González Pons también aludió al fantasma que puede suponer la llegada de un tripartito a la Comunitat y dejó claro que sería un peligro para la recuperación económica de la región y quiso aludir al nuevo escenario que se dibuja tras las elecciones europeas ya que «la Constitución también es respeto, diálogo, consenso y las fuerzas que promueven el rencor ya se habrían adueñado de la escena política: España sigue siendo una y de todos los españoles».

El presidente del PP en Castellón, Javier Moliner, quiso también mostrar su apoyo a la elección de alcaldes de forma directa. «Estamos en la piedra angular para ser capaces de seguir manteniendo la transparencia. Un alcalde sin votos es tan ridículo como un bocadillo sin pan, pero tienen miedo los que no son alternativa de nada, los radicales a los que sólo les une la voluntad de romper lo que hemos hecho».

Moliner se refirió a que «hay algunos que tienen miedo, como los de la coleta y el peluquín» y aseguró que este es el partido «de los alcaldes, de la gestión, que gana porque convence: este es el partido que defiende lo nuestro, nuestras tradiciones. Sin miedo y comprometido y si en política se han puesto de moda los círculos, estos son los círculos del PP».