35 subsaharianos entran en Melilla en un nuevo salto a la valla

Un total de 35 inmigrantes subsaharianos han conseguido sortear el cuádruple vallado fronterizo que separa Melilla de la ciudad marroquí de Nador. Cinco de ellos han sido atendidos con graves heridas y dos de ellos permanecen hospitalizados tras sufrir fracturas de consideración durante su intento de entrada.

Un grupo de unos cincuenta quedaba encaramado en lo alto del vallado fronterizo en la zona del paso de Barrio Chino. Aunque han ido descendiendo pasadas las horas, aún quedan varios sujetos a la alambrada aferrándose a su única esperanza de poder acceder a suelo europeo.

Eran las dos de la madrugada cuando el servicio de vigilancia de la Guardia Civil en la frontera de Melilla ha localizado a un grupo de unos cuatrocientos inmigrantes subsaharianos que se acercaba a la valla fronteriza por la zona conocida como Villa Pilar, entre el aeropuerto y el cementerio musulmán.

Tras haber sido controlados por el dispositivo antiintrusión desplegado a ambos lados del perímetro, tanto por el Instituto Armado como por las fuerzas marroquíes, el grupo se dividía entonces y se desplegaba a norte y sur. Cuando los pequeños grupos parecían retroceder y volver a los asentamientos del monte Gurugú, un nuevo grupo de unos doscientos jóvenes era localizado en la barriada marroquí de Barrio Chino, a escasos metros de Melilla.

Finalmente, este nuevo grupo conseguía sobre las 07.00 horas alcanzar su objetivo. A pesar del numeroso contingente desplazado a las distintas zonas, compuesto por unidades de la Comandancia de Melilla, grupos de Reserva y Seguridad y el helicóptero de vigilancia perimetral, un total de 35 inmigrantes conseguían traspasar el vallado y el control policial y llegaban al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Melilla por su propio pie.

Varios heridos

La Guardia Civil ha activado el protocolo humanitario y ha requerido la asistencia de la Cruz Roja para atender a varios inmigrantes que yacían heridos tras saltar el conjunto de vallas. Un total de cinco inmigrantes han requerido asistencia médica y dos de ellos han quedado hospitalizados al presentar sendas fracturas en pierna y tobillo.

Se espera que la presión continúe

El salto de hoy es el tercero que se produce en lo que va de año, tras un mes de enero bastante tranquilo, en comparación con el pasado año 2014.

Fuentes policiales y expertos aseguran que se espera un mes de febrero bastante activo respecto a la llegada de inmigrantes a Melilla debido a varios factores, entre los que destaca: el traslado de muchos inmigrantes de las inmediaciones de Ceuta a las de Melilla, la fuerte presión policial que Marruecos ha asegurado que va a ejercer sobre los asentamientos de inmigrantes en la provincia de Nador, el mal estado de la mar que imposibilita cruzar en embarcaciones y el gran número de subsaharianos que se agolpan en los campamentos del Gurugú que se estiman en unos 1.300 en estos momentos.