El exsuegro de Benavent entregó al fiscal material comprometido de Imelsa

La trama de amaño de contratos en la empresa de la Diputación de Valencia Imelsa salió a la luz con la sorpresiva salida de la firma de su exgerente, Marcos Benavent, a finales del pasado año. Pero el probable origen de la investigación que la fiscalía viene llevando a cabo en relación con estos hechos arranca de unos meses atrás. No sólo el material proporcionado por Esquerra sirvió de sustento de la posterior denuncia. Existe más documentación. Entre ella, la que aportó el exsuegro de Benavent, Mariano López Sancho, quien fue citado a declarar y entregó a Anticorrupción diversa documentación relativa a la empresa de la Diputación de Valencia y que, según las fuentes consultadas por este diario, podría haber servido a la fiscalía de hilo conductor sobre el que avanzar en las pesquisas de lo ocurrido en esta trama.

López Sancho trasladó al fiscal documentación de diverso tipo. En concreto, un lápiz de memoria con referencias a diversos documentos, fotocopias y talones cruzados de empresas investigadas por la trama. También, según las fuentes consultadas por este diario, de una o varias grabaciones realizadas supuestamente por el propio Benavent. Se desconoce cuándo se produjeron esas grabaciones y quiénes son los interlocutores. De igual modo, se ignora con qué intención acumuló Benavent esos audios. Las fuentes consultadas especulan que alguno de esos audios podría comprometer directamente al propio presidente de la Diputación, Alfonso Rus.

No hay que olvidar que antes de que la Fiscalía Anticorrupción presentara la denuncia en el juzgado, el ministerio público tenía abiertas unas diligencias de investigación penal. Es precisamente durante estas pesquisas donde se habría producido la colaboración del familiar del principal sospechoso de liderar la trama.

El exsuegro habría hecho entrega de esta documentación al fiscal tras localizarla en un ordenador que Benavent habría dejado en su vivienda -desde su sorpresiva marcha de la dirección de Imelsa, Benavent ha viajado en varias ocasiones a países de Sudamérica, y se especula con que se encuentra en uno de ellos-. La agencia Europa Press informó ayer de que se encuentra localizado por las autoridades y en un país con el que existe convenio de extradición citando fuentes conocedoras de esta situación. La parte fundamental de la información facilitada a Anticorrupción procedería de los documentos guardados en este equipo informático. Las fuentes consultadas por este diario no aclaran las razones por las que el exsuegro habría adoptado la decisión de extraer la documentación del ordenador de su exyerno para entregarla al fiscal.

La información facilitada por el exsuegro de Benavent podría encontrarse en el origen de la investigación que, junto con la denuncia realizada por la diputada provincial de EU Rosa Pérez, ha resultado determinante para desmenuzar los hechos que se investigan, y que ya han sido presentados en el juzgado. La investigación ha sido declarada secreta. Sólo el fiscal y el juez conocen con exactitud los hechos que se investigan.

La trama no utiliza ningún método ingenioso o un complicado entramado financiero para el desvío de fondos públicos. Como en la mayoría de las redes de corrupción el fraude consiste en interponer empresas pantallas que cobran a las adjudicatarias por un servicio a precio desorbitado o que en algún caso ni siquiera ha sido prestado. La firma clave es Berceo Mantenimiento detrás de la cual se sitúa Marcos Benavent. Esta sociedad facturó a Excavaciones Jemar, Carsan Rent a Car S.A., Carlady, Thematica Events y Forcal C.B-, que a su vez realizaban trabajos para la propia Imelsa, la corporación provincial y a Valmor, empresa organizadora de la Fórmula 1 en Valencia.

Los cobros por parte de Berceo serían, en realidad, comisiones para pagar la adjudicación de contratos a las anteriores mercantiles. Benavent disponía también de una segunda firma pantalla con la que actuaba presuntamente igual que con la de Berceo.

Ahora existen dos causas contra Benavent en juzgados de Valencia. No se descarta que lleguen a acumularse en un futuro. Una investigación parte de la denuncia de la propia Diputación de Valencia que detectó agujeros en su gestión y gastos sin justificar de algo más de 40.000 euros. Tal y como ya informó LAS PROVINCIAS, ya ha sido citado a declarar como imputado por este asunto. Y aparte figura la causa que se encuentra bajo secreto. La investigación abarca los contratos de la empresa pública, según la documentación que aportó EU. No obstante, se investiga si esta trama no estaba acotada a Imelsa sino que extendió sus tentáculos en la propia Diputación de Valencia. Esta circunstancia comprometería la gestión de Rus al frente del organismo ya que hasta la fecha había presumido de ser la única administración que no se había visto salpicada por un caso de corrupción.

La denuncia de la Diputación a Benavent se interpreta como el intento de crear una cortina de humo y distanciarse del que fuera uno de los hombres más próximos al presidente de la Diputación. El siguiente paso ha sido aceptar una comisión de investigación que será presidida por Compromís.

Esta decisión constituye un hecho llamativo, con el que el presidente provincial reacciona ante las informaciones relacionadas con Benavent, considerado durante mucho tiempo como persona de la máxima confianza de Rus.