Bonig se alía con Murcia por el agua, el Corredor y la financiación

La presidenta del PPCV, Isabel Bonig, se se reunió ayer en Murcia con el presidente del Gobierno de esa región, Pedro Antonio Sánchez, y el vicesecretario de Política Local y Autonómica del PP nacional, Javier Arenas, para tratar «asuntos de interés común para la Comunitat y Murcia, como el Corredor Mediterráneo o el asunto del agua.

Esta reunión se produjo tras la clausura de la Intermunicipal del PP de Murcia en la que participaron, según informó el PPCV en un comunicado. Durante este encuentro, los dirigentes populares abordaron «asuntos de interés común» para la Comunitat Valenciana y Murcia, como la situación del Corredor Mediterráneo, la crisis del agua y la financiación autonómica. Sobre estos temas, Isabel Bonig ha afirmado que se van a defender de forma conjunta, así como otros «asuntos tan vitales como la revisión del modelo de financiación, que se incluirá en el programa electoral de las generales».La presidenta del PPCV adelantó tras la reunión que llevarán a cabo «iniciativas comunes para defender los temas que preocupan a los ciudadanos en ambos territorios».

Bonig, también tuvo tiempo para repasar la situación de la Comunitat. «Se cumplen 60 días de la llegada del bloque de izquierdas al gobierno de la Generalitat, y dos meses han sobrado para desmontar el mito de la izquierda en España y que salga a relucir el verdadero corazón de la izquierda», manifestó. «Sabíamos que la llegada del tripartito serviría para exportar el modelo de secesión de Cataluña a la Comunitat Valenciana, y se ha demostrado que en este par de meses se han plegado a las intenciones secesionistas», aseveró la dirigente popular.

En su opinión, Puig «ha abandonado a los cinco millones de valencianos que no quieren dejar España y que no quieren que sus relaciones con Cataluña sea de subordinación, sino de construcción». Sobre la financiación autonómica, Bonig admitió que es necesario una mejora modelo de financiación, que actualmente discrimina a valencianos y murcianos, pero no ha considerado que «no hay que olvidar que fue Zapatero quien lo aprobó, y no he escuchado a ningún socialista pedir perdón por el agravio».

Bonig acusó a la izquierda de apropiarse «sistemáticamente de principios y valores que no son patrimonio de la izquierda».