Moragues avisa a los alcaldes de que no pueden quitar la bandera de España

La polémica abierta por algunos alcaldes de Compromís sobre la utilización de símbolos y enseñas ha espoleado a la Delegación del Gobierno en la Comunitat Valenciana para advertir a todos los ayuntamientos de Castellón, Alicante y Valencia sobre las obligaciones que tienen de mantener la bandera de España en los edificios municipales.

Cabe recordar, por ejemplo, el caso del alcalde del municipio castellonense de lAlcora, Víctor García, de Compromís, que prácticamente mantenía escondida tras una cortina la bandera de España que había en su despacho.

En la misiva dirigida a cada uno de los alcaldes, pero también a los secretarios de cada consistorio municipal, el delegado del Gobierno les recuerda que las banderas nacionales no se pueden eliminar de ningún edificio municipal, ni del exterior ni tampoco del interior.

En la circular mandada por Juan Carlos Moragues se cita la ley de 1981 que regula el uso de la bandera de España, según ha podido saber LAS PROVINCIAS de fuentes municipales. En ese sentido, el delegado del Gobierno advierte de que «la bandera de España debe ondear en el exterior».

De la misma manera, la enseña de España tiene que ocupar «el lugar preferente» en el interior «de todos los edificios y establecimientos de la Administración municipal del Estado» y para justificar esta indicación se remite al apartado primero del tercer artículo de la citada ley.

El delegado del Gobierno, además, incide en su escueta misiva en que en el caso de que cualquier Ayuntamiento utilice su propiao estandarte, «lo hará junto a la bandera de España».

En el caso de la utilización de otras enseñas, la ley que se encuentra en vigor establece que «la bandera de España ocupará lugar preeminente y de máximo honor» y acota, además que las restantes pabellones «no podrán tener mayor tamaño». La legislación pretende que ninguna otra bandera destaque por su tamaño sobre la enseña nacional española.

La mencionada ley señala, además, que cuando se utilice la bandera de España «ocupará siempre lugar destacado, visible y de honor». Para el legislador, el lugar preeminente y de máximo honor es «la posición central» cuando el número de banderas que ondeen juntas sea impar.

En el caso de que el número de banderas sea par, «de las dos posiciones que ocupan el centro, la de la derecha de la presidencia si la hubiere o la izquierda del observador» es donde se tiene que colocar el distintivo español.

En la directriz remitida ayer por la Delegación del Gobierno también se hace hincapié en el tratamiento que los alcaldes deben ofrecer a la imagen del Rey de España. La actual legislación «establece la obligación» de que la efigie del Rey «se coloque en lugar preferente del salón donde se celebren las sesiones del pleno del Ayuntamiento».

Lo normal es que en las casas consistoriales haya fotos del jefe del Estado, pero en aquellos de mayor tamaño, como es el caso del Ayuntamiento de Alicante, suelen disponen de algún busto del jefe del Estado, todavía del Rey Don Juan Carlos I, el anterior jefe del Estado.

Y fue precisamente en el Ayuntamiento de Alicante donde a finales del pasado mes de julio el cabeza de lista de Guanyem propuso a sus socios del equipo del equipo de gobierno municipal, Compromís y PSPV, retirar el busto de Don Juan Carlos I.

El vicealcalde y cabeza de lista de Guanyar Alacant, Miguel Ángel Pavón, planteó que el busto de Don Juan Carlos podía estar en un museo de la historia de la ciudad y que ya tenían «por imperativo legal» la foto del actual jefe del Estado, el Rey Felipe VI, en el salón de plenos del consistorio de la capital de la provincia alicantina.

La decisión del vicealcalde populista de Alicante, que se quedó en agua de borrajas ante la negativa del principal partido de la coalición, el PSOE, y las medias tintas mostradas por Compromís, fue una reacción que a la que solamente unos pocos días antes se había producido en el Ayuntamiento de Barcelona, donde la alcaldesa, la también populista Ada Colau, decidió la retirada del busto del Rey Juan Carlos I porque había dejado de ser jefe de Estado en junio de 2014.

Y ayer mismo, después de que la Delegación del Gobierno remitiese vía telemática a alcaldes y secretarios municipales las oportunas indicaciones para dejar claro que la bandera de España tiene que estar presente tanto en el exterior de los edificios municipales y en un espacio «preferente» en el interior de los mismos y que la fotografía del Rey debe de estar presente en el salón de plenos, el grupo parlamentario de Ciudadanos anunció la presentación de una proposición no de ley por vía de urgencia sobre el uso de la Senyera y de la bandera nacional.