

Secciones
Servicios
Destacamos
Rafa Muñoz
Lunes, 16 de noviembre 2015, 19:53
El pasado mes de mayo, tras las elecciones locales y autonómicas, muchos concejales y diputados abandonaron la política. Unos, por el cambio de color en algunas instituciones. Y algún otro, por jubilación. Uno de estos políticos es Rafael Ferraro.
A sus 73 años, este exdiputado de Ruzafa ha estado presente en seis legislaturas de Les Corts, con Unió Valenciana primero, y más tarde con el Partido Popular. Ahora, ya jubilado, su segunda pasión, las Fallas, copan su tiempo libre.
"Por las mañanas me levanto prácticamente a la misma hora que siempre, entre las siete menos cuarto y las siete y media; después, sobre las nueve, incluso antes, ya salgo a la calle para hacer gestiones; la comida en casa habitualmente, y luego una siesta de sillón; a partir de las siete de la tarde suelo tener reuniones de la Federación, que lleva su trabajo".
Un viernes de noviembre acompañamos a Ferraro durante toda la jornada, que comienza pronto en su casa de Ruzafa, donde desayuna junto a Merche, su mujer desde hace 48 años. En torno a las diez de la mañana Rafael se subió al coche de su amigo José Vicente, compañero en la junta directiva del Levante UD durante muchos años, y juntos se acercaron a la nave del artista fallero Juanjo García.
Tras la visita, ambos acudieron al Ateneo Mercantil, donde suelen leer la prensa y comentar la actualidad. "Se echa de menos un poco, por llamarlo de alguna manera, el circo parlamentario; creo que últimamente se nos ha acostumbrado un poco mal a que sea eso, y el parlamento no es un circo; es un lugar donde confluyen las opiniones de todo el mundo, todas respetables, pero no hay que hacer un circo de todo eso", señaló Ferraro.
"Aquí se ha hecho un pacto político antinatural, es mi opinión; el PSPV tendrá problemas, han querido echar al PP a costa de cualquier cosa; han pactado con Compromís, que la mayor parte son nacionalistas, prácticamente separatistas; y Podemos ya veremos lo que es", añadió.
Respecto a la corrupción, opinó que "se ha creado una idea de aquí ser político es ser corrupto, y eso no es así; para mí han sido una minoría, que se ha localizado y se les está tratando como se merecen judicialmente; aquí ha pasado que un imputado se ha convertido en un maleante, y eso no es así".
Ferraro se mostró crítico con la política interna de su partido, y rechazó también la idea de limitar el tiempo que una persona puede ocupar un cargo público.
"La línea roja que se marcó en ese momento, que era ser imputado, yo no lo habría hecho; yo habría ido, como pronto, al procesamiento; ha ocurrido recientemente que la imputación no ha ido a ningún lado, pero el mal ya estaba hecho", señaló Ferraro.
"No puede ser que una persona entre en la política a los 25 años y deba dejarlo a los 33; otra cuestión es que haya normas para que no puedas repetir en los mismos cargos pero puedas dedicarte a otros; la experiencia es importante", opinó.
En 1982, Ferraro fue uno de los fundadores de Unió Valenciana, partido con el que fue diputado a finales de la legislatura de 1991, y prácticamente al completo en la de 1995.
"El valencianismo político fue potente, pero hubo un momento en que en lugar de valencianismo entraron otras cuestiones; el corazón se fue diluyendo y se acabó todo", aseguró. "En el tema valencianista, el PP no ha sabido recoger a toda la gente que hay con posibilidades; podría y debería haberlo hecho, pero no lo hemos sabido hacer".
Ahora ya jubilado, Ferraro dedica gran parte de su tiempo libre a las fallas. Ha sido fallero toda la vida, y presidente de la comisión de Reino de Valencia-Duque de Calabria durante 36 años. Desde el pasado mes de junio ocupa el cargo de presidente de la Federación de Fallas de Especial.
"Las Fallas son mi vida, en mi casa se habla de ello todos los días, y estamos todos metidos en la fiesta", comentó por la tarde en un acto en el Ateneo Mercantil, al que acudió la Fallera Mayor de Valencia junto a su corte de honor. "Es un honor representar a las Fallas que más suenan, aunque son todas importantes; es un honor y una gran responsabilidad", aseguró.
"En la fiesta no debería influir un color u otro; cada partido tiene su propia idea de la fiesta, y ahora habrá que esperar a ver qué idea llevan los señores que están ahora en el Ayuntamiento", comentó respecto al cambio de signo político en el consistorio. "Las Fallas somos escuelas de convivencia; no miramos etiquetas, ni partidos, ni la situación de cada persona; todos cabemos en una falla", concluyó.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.