Sanz dice tener la conciencia «muy tranquila» sobre los contratos de la visita del Papa

El ex secretario general de RTVV Vicente Sanz ha asegurado hoy tener la conciencia "muy tranquila" sobre los contratos de la Radiotelevisión Valenciana durante la visita del papa Benedicto XVI a Valencia en 2006, y que fueron los técnicos los que dijeron que la opción de Teconsa era la "más idónea".

Sanz ha hecho estas manifestaciones a los periodistas tras declarar esta mañana como imputado, durante cerca de dos horas, en la pieza 4 del caso Gürtel ante el magistrado instructor, José Francisco Ceres, que investiga posibles delitos fiscales, de prevaricación y cohecho en la contratación de RTVV con la mercantil Teconsa para el suministro de pantallas, vídeo, sonido y megafonía.

"Sigo manteniendo lo que vengo manteniendo desde la primera vez que declaré como testigo, que nosotros votamos la opción Teconsa porque era la que la unidad técnica había dicho que era la más idónea y nada más", y que fueron los técnicos los que "recomendaron" la compra", ha insistido.

Sanz ha sostenido asimismo que "no hubo ninguna prisa" en la adjudicación, aunque ha reconocido que "en el tema de la visita del papa todo era muy rápido", y que "había once expedientes que se hicieron entre abril y julio" y que "entonces había una cierta celeridad pero no que hubiera nada raro".

Preguntado también sobre el supuesto sobrecoste de la adjudicación, el ex secretario general de RTVV ha respondido que "no puede decir a qué se debe" y que él "no es un técnico" y que carecía de conocimientos para decir si en el mercado tenía ese valor o no.

Ha aseverado que los técnicos "no pusieron reparo" a la adjudicación a esta empresa, "y por lo tanto los que somos legos en esta materia pues creemos que el mercado está en estas cifras".

Preguntado también sobre si recibió alguna presión para la adjudicación, ha respondido de forma rotunda que "ninguna", y ha negado haber recibido llamada alguna del exconseller del PP Juan Cotino, así como haber dado alguna orden para que se favoreciera o tuviera en cuenta a esta empresa.

Ha argumentado asimismo que su papel en la Mesa de Contratación era "escuchar el informe del secretario de actas que vela por el proceso administrativo", así como el de la "asesoría jurídica que vela por los pliegos, las cláusulas laborales, fiscales y mercantiles, y el informe técnico que era una comparativa entre las empresas, así como ver cuál era la empresa que cumplía exactamente el pliego de condiciones y nada más".

"Mi labor -ha precisado- era más de oír que de actuar porque no soy, ni mi carrera ni mi profesión es, una persona que conoce el tema".

Ha defendido asimismo que en 2004 ocupaba el cargo de director de gestión, y que los administradores únicos eran "el director general, el director de la tele y el director de la radio" y "luego estaban los jefes de departamento".

Sanz ha negado asimismo haber "oído en ningún sitio" que compañeros suyos fueran a la dirección de RTVV para advertir que acabarían todos en el banquillo por esta adjudicación.

Preguntado por último si considera que los responsables de RTVV, incluso los que estaban por encima de él, actuaron bien en esta adjudicación, ha respondido que "cada uno actuaría según su conciencia" y que él la tiene "muy tranquila".