Las empresas de Alfonso Rus atraviesan graves dificultades desde hace años

En plena crisis económica, Alfonso Rus estrenó nuevo Ferrari. Parecía que la crisis no le había afectado con tanta crudeza al político setabense como al resto de empresarios del mueble o del negocio inmobiliario. Al menos eso es lo que hacía pensar su tren de vida. Sin embargo, su patrimonio personal declarado oficialmente ante la Diputación de Valencia y Les Corts no corroboraban esa situación. Lo mismo que las empresas que figuran a su nombre en el Registro Mercantil (o al menos de las habían presentado sus cuentas) y con las que respaldaba públicamente su nivel de vida.

El Boletín Oficial de la Provincia de Valencia (BOPV) del pasado mes de julio le atribuía a su salida de la Presidencia de la Diputación un patrimonio de 624.681,24 euros. Una cantidad que contrastaba con los 916.018,68 euros que reconocía tener en 2011. En cuatro años había perdido un 32% de su fortuna personal declarada. En nada había tenido que ver la devaluación de activos inmobiliarios, ya que ni en un año ni en otro reconoció tener inmuebles de su propiedad.

Sí reflejaba la administración de cuatro sociedades mercantiles, aunque el Registro Mercantil le relaciona con más. Por empezar el análisis por la que la Guardia Civil registró la noche de su detención, FDM (Fabricación y Distribución del Mueble), la firma no entrega las cuentan al Registro Mercantil (lo que permite su consulta pública) desde el año 2002, siendo ya alcalde de Xàtiva y dos años antes de ser elegido presidente provincial del Partido Popular. En ese momento, la marcha de la empresa era buena y había empezado a internacionalizar, de lo que queda constancia al reconocerse la constitución de Finlar Productos de Consumo LTD, con sede en Reino Unido, país desde el que se puede operar con distintos paraísos fiscales situados en el Canal de la Mancha. Más tarde llegaría la creación de la filial Finlar Productos LDA en Portugal (que ofrece ventajas fiscales para la inversión en Mozambique, Angola y Brasil, país que se investiga como lugar de posible blanqueo de dinero negro) y, fruto de la información reflejada en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME), una ampliación que dio paso a otros socios que terminaron su relación años más tarde tras un conflicto societario.

Esta decisión de no presentar las cuentas no es extraña en casa de los Rus. Su mujer, Begoña Ricart es administradora única de RUS 2 SL, que se constituyó en 1998 y que nunca ha presentado sus cuentas al registro. Además, aunque está dedicada oficialmente al comercio al por menor de aparatos electrodomésticos, en su sede social, situada en Avenida Gregorio Molina, 9, en Xàtiva, es donde está la tienda de moda que regenta Begoña Ricart: Russini.

Distinto es el caso de la sociedad inmobiliaria Albeba SL, que gestiona los inmuebles de la familia y que está a nombre de la esposa de Rus. Fundada en 1992, sí ha presentado cuentas, aunque sólo hasta 1995, cuando dejó de hacerlo. Por otra parte, Russini Quality SL, dedicada al comercio al por mayor de prendas de vestir, administrada por su hija Bárbara Rus Ricart y domiciliada en el polígono industrial del municipio, presentó cuentas por última vez hace ocho años y no parece tener actividad desde 2013.

Sí que se puede apreciar la situación de tres de los negocios inmobiliarios de Rus, los que administra con Luis Molla. Todos ellos han presentado sus cuentas en el Registro Mercantil y muestran un profundo deterioro de su situación. Así, Aquivent MR, dedicada a la administración del alquiler de inmuebles perdió en 2014 5.675,69 euros, los que empeoraba en un 3,46% el resultado de 2013.

Por contra, se mantienen en beneficios las mercantiles Edificio Requena y Promociones MR, aunque su evolución en los últimos ejercicios está siendo negativa. La primera, dedicada a la promoción inmobiliaria, ganó en 2014 unos escasos 2.701 euros (un 5,29% menos que en 2013), resultado de operaciones extraordinarias, ya que no ingresó ni un euro por el negocio del arrendamiento, según el Registro Mercantil. A su vez, Promociones MR ganó 35.909 euros en el último año que ha presentado cuentas, pero esto significa un desplome del 24% respecto a 2013.