Autoridades y excargos del PSPV despiden a Asunción

El expresidente de la Generalitat, Joan Lerma, el exconseller y exsecretario de Organización del PSOE, Ciprià Ciscar, el exconseller Máximo Buch, el exministro Tomás de la Cuadra, el director de la Agencia de Emergencias José María Ángel y el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, entre otras personalidades, acudieron ayer a dar el último adiós a Antoni Asunción, el exministro del Interior y exalcalde de Manises que falleció el pasado sábado a los 64 años víctima de una enfermedad que acabó con su vida en apenas unas pocas semanas. La muerte de Asunción conmocionó este fin de semana a la clase política española. Los recuerdos y reconocimientos hacia la figura de quien fuera impulsor de la política de de dispersión de presos etarras, desde la dirección general de Instituciones Penitenciarias que ocupó justo antes de ser nombrado ministro en el Gobierno de Felipe González se sucedieron desde prácticamente todas las formaciones políticas, que coincidieron en subrayar su papel en la conformación del autogobierno valenciano, su honestidad como responsable público y su carácter íntegro, que le costó también momentos complicados como cuando le comunicó a González su decisión de dimitir tras la fuga de Luis Roldán. Entre los recuerdos hacia Toni Asunción, el del líder de Ciudadanos Albert Rivera, que ayer, a través de una red social, recordó las páginas que le dedicó en su libro Juntos podemos al exministro valenciano que en los últimos años colaboró de manera intensa con la formación naranja.

Rivera, que se refiere a Asunción como «un demócrata que protegió nuestras vidas», relata que el saberse señalado por la banda terrorista obligó al entonces alto cargo del Gobierno a cambiarse de vivienda en sucesivas ocasiones en Madrid, consciente de ser objetivo de ETA. «Incluso cuando vivía en Valencia los primeros que entraban en su casa eran los TEDAX», recuerda Rivera de quien también contribuyó al final de la banda.