Les Corts aprueban modificar la ley para poder revocar a senadores ante la «pérdida de confianza»

El pleno de las Corts Valencianes ha aprobado, con el apoyo de todos los grupos menos el PP, la tramitación de la proposición no de ley presentada por Podemos para modificar la ley de designación de senadores territoriales, en la que se incorpora la posibilidad de revocación de los nombramientos por el parlamento valenciano si se produce la pérdida de confianza como consecuencia de actuaciones "lesivas para los intereses generales de la Comunitat" o comporten el desprestigio de sus instituciones.

Según ha defendido el portavoz de Podemos, Antonio Montiel, se trata de una propuesta que no va "contra nadie, contra ningún partido", sino que su objetivo es "no permitir comportamientos indignos" y que en el Senado los valencianos estén representados por gente que "no encarna la honestidad y la dignidad de este pueblo".

Montiel ha subrayado que esta propuesta encaja en el ordenamiento jurídico y hay jurisprudencia al respecto, al tiempo que permite mantener la proporcionalidad de los nombramientos, dado que si se produce la revocación de un senador de un grupo éste deberá proponer un nuevo nombre para ocupar la vacante.

El diputado ha destacado que "no tendría ninguna lógica" que las Corts puedan destituir por mayoría absoluta al presidente y que los senadores sean "intocables". En todo caso, ha incidido en que no se trata de una "ley de revancha", sino que busca introducir la "decencia" en las instituciones.

Por su parte, el diputado del PP Alfredo Castelló ha criticado duramente esta iniciativa, de la que ha dicho es "una ley ad hominem" --que "en Venezuela no pasa nada pero aquí sí", ha dicho-- y está dirigida a la senadora Rita Barberá, y se ha preguntado "cuál va a ser el siguiente paso": "¿Volveremos a los escraches, a las camisetas de 'se busca', a carteles en la calle con puntos de mira?", ha dicho mostrando una foto de la pintada aparecida cerca del domicilio de Barberá.

Asimismo, ha criticado la "persecución ideológica" al PP porque, según ha dicho, "hay un senador de Compromís --en referencia a Carles Mulet-- que dice que no está de acuerdo con la Constitución" y que "está imputado", por lo que ha preguntado "hacia dónde mira" en este caso Podemos. Al respecto, el portavoz de Compromís, Fran Ferri, ha negado esa imputación.

«Destroza el ordenamiento»

Para Castelló, esta propuesta "destroza el ordenamiento jurídico y los valores constitucionales" porque las causas de revocación "generan indefensión, son ilegales e inconstitucionales". Además, ha recordado el "rapapolvo" que da el Consell a esta proposición de ley en su criterio, pese a ser favorable en última instancia. "Los tiene usted atemorizados. Podemos manda, el Consell obedece... esa es la mejor conclusión de esta ley".

Antonio Montiel ha asegurado que el PP tiene "miedo" a Barberá y a sus mensajes que "siembran terror en las filas populares", para asegurar que lamenta la pintada aparecida cerca de su casa, algo que él "jamás toleraría" porque "no son formas de defender posiciones políticas".

«El boomerang les cae sobre su cabeza»

Desde el PSPV, su portavoz, Manolo Mata, ha indicado que votan a favor de la tramitación de esta propuesta, ante la que ha mostrado diversas discrepancias, tan sólo para poder enmendar la ley de designación de senadores de 2010 aprobada por el PP y que, según ha dicho, se realizó para "humillar" a la socialista Leire Pajín.

Según ha dicho, "el odio, la maldad, la voluntad de humillar... todo eso cuando se ejerce se paga en política y en la vida" y en 2010 el PP decidió "machacar, vilipendiar y humillar" a Pajín y ahora "se están encontrando con que el boomerang les cae sobre la cabeza". En todo caso, ha mostrado su condena a cualquier amenaza a cualquier persona, en relación a la pintada sobre Barberá.

Respecto a la posibilidad de revocación de senadores por pérdida de confianza, ha ironizado asegurando que ni él ni su grupo ha confiado nunca en Barberá pero ha advertido de que en un primer plano debe estar la libertad de ejercer la acción política y se ha preguntado "dónde está la raya de la dignidad". A su juicio, la ley de 2010 fue "una cafrada" y hoy "se quiere contestar con otra cafrada".

Precisamente Fran Ferri (Compromís) también ha hecho hincapié en sus recelos en torno a la posibilidad de revocación por mayoría absoluta ante la preocupación de que "se vuelva en contra de las minorías" y se pueda caer en la arbitrariedad. A su juicio, es positivo regular la designación, revocación y comparecencia de los senadores, pero "el texto necesita cambios" para garantizar los derechos de las minorías.

Desde Ciudadanos, Carmen Sánchez ha mostrado su apoyo, aunque también ha apostado por realizar ajustes para evitar que estos mecanismos de revocación se conviertan en "triquiñuelas partidistas".

Votación secreta y por mayoría absoluta

El texto señala que la revocación de un senador deberá ser propuesta al menos por la décima parte de los diputados, alegando las causas que la justifican, el senador será requerido a comparecer en comisión en las Corts y en el pleno se procederá a la votación, secreta y que deberá ser aprobada por mayoría absoluta.

Además, regula que las comisiones podrán solicitar la comparecencia de los senadores territoriales para informar sobre temas relacionados con su actividad parlamentaria de interés para la Comunitat y la asistencia será obligatoria.

El Consell manifiesta en el criterio sobre la proposición una serie de observaciones, entre ellas la necesidad de mantener la proporcionalidad de los grupos si se produjera una revocación y manifiesta su preocupación por el "uso partidista" que podría hacerse de este mecanismo para "destituir a personas que resulten incómodas para la mayoría parlamentaria", por lo que propone cambiar la mayoría absoluta por mayoría de dos tercios y que sólo pueda producirse en casos excepcionales y concretas.