D. Burguera
Lunes, 25 de julio 2016, 13:00
El tripartito (PSPV, Compromís y Podemos) forzará tres votaciones para lograr que el Consejo Rector de la nueva RTVV esté presidido por el candidato propuesto por el PSPV, Josep López, que a pesar de haber obtenido inicialmente el apoyo de Ciudadanos (en un protocolo firmado por los cuatro partidos el pasado martes, que al día siguiente ya se anunció como inadecuado y que el jueves no pasó la revalida de votación en una comisión de Les Corts), deberá conformarse con el apoyo de la mayoría absoluta de la Cámara.
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En un principio, la nueva ley, con el fin de ofrecer a los elegidos un respaldo parlamentario consistente, estableció que un presidente del órgano de gobierno de la nueva televisión valenciana deberá ser refrendado con el voto de dos tercios de Les Corts; es decir, 66 diputados. El paso atrás de Ciudadanos (justificado hoy, tras la Junta de Síndics, por considerar que se les ocultó información sobre el vínculo familiar entre López y dirigentes socialistas) impide al tripartito conseguir los dos tercios. En una segunda votación es necesario tres quintos de los votos; o sea, 60 diputados. Hasta ahí tapoco llega el tripartito, de modo que forzará una tercera ronda de votos, cuando ya se podrá lograr el nombramiento de López, ya que en ese tercera oportunidad sólo es necesaria la mayoría absoluta.
López deberá esperar al jueves para ser presidente del Consejo. Pasado mañana se celebrará un primer pleno. Tanto Ciudadanos como PP han anunciado que se opondrán al candidato de los socialistas (es marido de la prima de Alfred Boix, número dos del PSPV). De este modo, habrá una segunda y tercera votación el jueves, al día siguiente. Tres plenos en 48 horas con el fin de lograr contar con un presidente, que precisamente por esas extrañas circunstancias, sólo podrá estar al frente de la corporación durante seis meses. Nadie ha querido aclarar qué pasará en enero, cuando acabe ese medio año de vigencia de una presidencia interina.
En cualquier caso, el arranque de la nueva televisión aún puede enmarañarse más. El resto de miembros del Consejo Rector, los vocales, serán votados por separado del presidente y en dos turnos. Si no se obtiene tampoco las mayorías requeridas en ese par de refrendos (66 votos en primera convocatoria o 60 en la segunda), ya ni siquiera se celebrará una tercera votación, según explicaron ayer fuentes socialistas. Podría darse el caso de que si Ciudadanos considera que se agrava la tensión (por la situación de "deslealtad y traición por ocultarnos información" durante el tramo final del proceso de nombramientos, que acaba de denunciar su portavoz en la junta de portavoces) los diputados de C's tampoco voten a los vocales, de tal modo que habría presidente pero no Consejo Rector, toda una paradoja a cuenta de lograr conformar el órgano de gobierno de la televisión antes de iniciarse las vacaciones de agosto. Sin Consejo Rector no podría iniciarse la contratación de personal y la adjudicación de las inversiones necesarias para las emisiones en pruebas que el Consell pretende iniciar en el mismo mes de agosto.
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