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FERRIOL MOYA
Martes, 28 de marzo 2017, 20:45
El nuevo presidente del PP de Aragón, Luis María Beamonte defendió este fin de semana el rechazo explícito al trasvase de agua del Ebro. «No, no y no», dijo el dirigente popular, apelando a los acuerdos electorales alcanzados con el PAR en 2015. La posición de los populares aragoneses sobre el debate del agua no es nueva.
La del PP valenciano, tampoco. Una de las enmiendas presentadas al congreso que se celebra el próximo fin de semana -y que viene avalada por el poderoso PP alicantino que dirige José Císcar- reivindica las aportaciones externas, «incluidos los trasvases» como herramienta para resolver el déficit hídrico estructural de las cuencas valencianas.
Textualmente, la enmienda presentada a la ponencia política propone incluir un nuevo compromiso político del PPCV: «Defender y exigir, ante las instancias correspondientes del Estado español y la Unión Europea, la llegada de los aportes externos, incluidos los trasvases, que sean necesarios para solucionar el problema de déficit hídrico estructural que padece la Comunidad Valenciana». Del texto se concluye que el PPCV mantiene su tradicional reivindicación de los trasvases. Y que pese a no citarse el del Ebro, no se descarta ninguno.
Pero no sólo eso. La alusión a los aportes externos que pretende sacar adelante el PP valenciano tiene un matiz económico que, aunque no se expresa formalmente, es el que da la verdadera envergadura de la propuesta. No limitar los aportes externos a los trasvases implica extenderlos a la financiación de las vías alternativas creadas para corregir el déficit hídrico. Y en particular, las desalinizadoras.
Las fuentes del PP valenciano consultadas por este diario explicaron ayer que lo que se pretende con esta enmienda es dar un nuevo enfoque al problema hídrico de la Comunitat Valenciana. «Exigiremos que en el próximo Plan Hidrológico Nacional, además de trasvases (y no descartamos ninguno) el reparto de los gastos de amortización de las desalinizadoras sea nacional», se justificó desde el PP de la provincia de Alicante.
La explicación de la nueva posición del PP valenciano -en el caso de que la enmienda se incorpore al texto definitivo de la ponencia política- tiene que ver con la argumentación que algunas CC AA utilizan en el debate sobre la reforma del sistema de financiación autonómica y la invitación a la solidaridad que desde esas regiones -las tradicionalmente conocidas como 'pobres'- hacen al resto para que aporten sus fondos. «Nosotros contribuimos aportando más de lo que recibimos en términos de financiación. Otros pueden ser solidarios contribuyendo con lo que tienen, que es el agua», se remarcó.
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