Climent contrata ayuda para organizar Economía tras año y medio en el cargo

La llegada del tripartito al Gobierno valenciano en el verano de 2015 no resultó sencilla. Después de veinte años de hegemonía del PP, con una administración autonómica agujereada por las deudas y con una «hipoteca reputacional» -como gusta de decir Ximo Puig- que afectaba a la Generalitat, organizar un Gobierno entre dos partidos con tan pocas cosas en común hasta entonces como PSPV y Compromís, no resultó sencillo.

Aquello ya es historia. La realidad señala que casi dos años después -este verano se cumple el ecuador de la legislatura- algunos consellers todavía no tienen claro cuál debe de ser la organización idónea de su departamento. La conselleria de Economía que dirige Rafael Climent es el mejor ejemplo. Este departamento convocó a finales de 2016 -casi dieciocho meses después de llegar al cargo- un concurso para la adjudicación de un contrato menor. ¿El propósito? Elaborar un «cuadro de mando integral» para la conselleria de Economía.

¿Y qué es un cuadro de mando integral? En la memoria de la contratación que el propio departamento que dirige Climent ha facilitado al PP -y que tiene fecha de diciembre de 2016- se explica que se ha detectado «la necesidad de establecer unos sistemas de seguimiento de la implementación eficaz de las políticas públicas de esta legislatura», marcadas, se explica, por el programa electoral, el Pacto del Botánico y sus revisiones y actualizaciones en los posteriores seminarios del Consell.

El texto plantea la necesidad, pasado un año y medio desde el inicio de la legislatura, de «recoger toda esa información y estructurarla mediante un modelo de apoyo adecuado». Y añade: «Hay que definir un cuadro de mando integral (CMI) de la conselleria, para que sea un instrumento de ayuda que recoja de forma sistematizada y sintética una visión compartida de las prioridades políticas de la conselleria en relación con los objetivos estratégicos definidos y los que se establezcan en la gestión, y que permitan el seguimiento y evaluación de las actuaciones realizadas».

La redacción, que en algunos aspectos recuerda aquellos enrevesados textos que figuraban en la memoria de la Fundación Cical impulsada por el exnúmero tres del PSPV José Manuel Orengo, explica que la conselleria no dispone de personal «con la adecuada especialización» para realizar este trabajo que, según se precisa, se considera necesario «para garantizar el buen funcionamiento de la conselleria». No deja de ser significativo que el departamento de Rafael Climent llegue a esa conclusión tras año y medio en el cargo.

La memoria del contrato, que a continuación relata la definición de lo que es un cuadro de mando integral, las labores que debería realizar -entre las que se incluye la estructuración de las políticas públicas en ejes, objetivos y actuaciones en cada área de actuación: direcciones y subdirecciones generales, así como la definición del mapa estratégico de la conselleria-, establecía un plazo de ejecución de 45 días desde la adjudicación del contrato.

¿Y quién resulta adjudicatario? El expediente facilitado por Economía explica que se solicitaron ofertas a un total de nueve entidades: el Instituto Universitario Polibienestar, Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE), Universitat de València, Universitat Politècnica de València, Universitat d'Alacant, Universitat Miguel Hernández d'Elx, UJI, Bismart Business Intelligence y Deloitte. Pero sólo presentaron ofertas las universidades de Alicante y la Miguel Hernández.

Economía se decantó por la segunda con una oferta económica algo más favorable: 12.100 euros, frente a los 14.520 de la primera. La resolución de la adjudicación, con fecha del 1 de diciembre, certifica esa decisión y reitera el plazo de ejecución del contrato los 45 días naturales. El plazo se cumplió, por lo tanto, el pasado 15 de enero.

Concejal de Cs

La oferta presentada por la Miguel Hernández, con fecha de entrada en la conselleria del 17 de noviembre, especifica el profesorado que se encargaría de la elaboración de ese cuadro de mando integral: Enrique Conejero Paz, profesor contratado, doctor en Ciencia Política y de la Administración, como investigador principal; Victoria Rodríguez Blanco, profesora colaboradora de Ciencia Política y de la Administración; y María Quiles, profesora asociada de Ciencia Política y de la Administración.

Dos de esos nombres resultan llamativos. María Quiles es la concejal de Cultura, Contratación y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Almoradí, elegida en la lista de Ciudadanos. Quiles posee cierta trayectoria política toda vez que ya ocupó la cartera de Cultura y Educación de ese consistorio, pero con el PP de esa localidad. La edil abandonó la primera fila política en 2011, para volver cuatro años después bajo las siglas del partido de Albert Rivera. Climent cuenta con una concejal de Cs para que le aclare cómo reorganizar su departamento. Otro nombre significativo es el de Enrique Conejero, profesor cubano de 53 años, licenciado en Económicas por la Universidad de La Habana, y que será el investigador principal en la reestructuración de la conselleria.