La Agencia Antifraude también pierde al jefe de Informática

valencia. Si la situación de la Agencia Antifraude ocurriera en una empresa privada resultaría más que probable que el máximo responsable de la firma hubiera dejado de serlo. Pero en la Agencia, impulsada en su día por Podemos y capitaneada por Joan Llinares, no deja de sumar nuevos abandonos al proyecto inicial. El jefe de Informática también ha comunicado que será baja en el organismo dedicado a la lucha contra la corrupción. Lo hará el próximo 1 de diciembre. Este responsable era quien se encargaba de los proyectos de Hervé Falciani, el exempleado de un banco suizo que ahora trabaja en proyectos para prevenir conductas irregulares en la Administración. Y, además, el pasado mes de octubre se confirmó la marcha de otra jefa de servicio. En este caso, bajo el mandato del que fuera jefe de investigación.

Estas salidas se suman a la última salida del director de investigación, Marcial González. El agente de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha tenido problemas a la hora de que el Ministerio de Defensa le concediera la condición de Servicios Especiales para seguir al frente de este departamento de la Agencia, tal y como informó el propio Llinares a LAS PROVINCIAS.

Este panorama se contextualiza con los anteriores abandonos, más de una decena de altos responsables en un periodo de aproximadamente un año. Uno de los más sonados fue el del primer jefe de investigación, un abogado de la Generalitat que no llegó a cumplir ni seis meses al frente de la sección. La enorme carga de trabajo, la falta de medios y la especial forma de trabajar de Llinares fueron los detonantes del fin de aquella experiencia. A esa fuga le sucedieron la de otros responsables de la institución como el jefe de servicio de la Generalitat y Sector Público y el director de administración.

El Diari Oficial de Generalitat Valenciana publicó ayer la provisión de nuevas plazas para cubrir los puestos de letrados y también la de un responsable de los Servicios Jurídicos. Antifraude sigue tratando de completar su plantilla pese a las enormes dificultades.