Aitana Mas vuelve a Les Corts tras superar un cáncer

La diputada de Compromís y exvicepresidenta del Consell regresó «emocionada» y con «muchísimas ganas. Por momentos pensaba que no volvería a pisar estas Corts y poder estar hoy aquí es un paso importantísimo para mí personalmente, para mi familia y hacerlo en un día como hoy aún tiene más sentido». Así lo manifestó la parlamentaria en declaraciones a los medios de comunicación antes de acceder al hemiciclo, donde este jueves se celebró el pleno.

«Es un día raro porque estoy muy contenta y muy feliz por volver a Corts casi un año después. Me cuesta mantener la emoción, pero me cuesta más ver a la gente que ha perdido a sus familiares, que ha perdido sus casas, que lo ha perdido todo y que no encuentra respuesta adecuada en un gobierno como el valenciano», reivindicó Mas. De hecho, la diputada le lanzó un rapapolvo a Mazón para estrenarse durante la sesión de control al presidente, al que pidió su dimisión. El jefe del Consell le había saludado efusiva y afectuosamente antes de empezar el debate, así como la mayoría de diputados y diputadas de todos los partidos. El síndic de Vox, José María Llanos, le felicitó por la vuelta y le aseguró que «rezamos por usted», ante lo cual Mas se encogió un poco de hombros primero y lo agradeció después.

«Que este señor que preside la Generalitat esté ahora en la cafetería de Les Corts, que entre por la puerta de atrás y no sea capaz ni de mirar a la cara a esta gente y decirles 'lo siento, lo hice mal', habla mucho de su persona», lamentó Mas, que se mostró convencida de que «hoy hay que exigirle la dimisión. Y espero que por decencia política los diputados y las diputadas de todos los partidos voten a favor de esta dimisión». No fue así.

Mas pidió la palabra al inicio de la sesión. La presidenta Llanos Massó se ausentó por un problema de salud de su madre, así que ejercía de presidente en funciones Alfredo Castelló, que desgracidamente sabe muy bien qué supone una situación como la que ha atravesado Mas, a la que se la ha concedido indubitablemente.

«Por muchos momentos pensé que quizás no volvería a estas Corts, y poder hacerlo hoy es importantísimo y quería devolver todo el apoyo y afecto que he recibido por parte de muchísima gente a lo largo de estos meses, a todo el personal de la 'casa', a los periodistas, a mis compañeros, a los 99, y en especial a mi familia, a mis amigos...», y especialmente a su oncólogo (Eugenio Palomares), pero sobre todo a su familia, la de sangre y la que ha formado ella con su marido y sus dos hijos, de tres y apenas un año.

Para finalizar, Mas ha dado las gracias «a la gente que ha pagado sus impuestos y que ha permitido que pueda haber sido tratada en un tratamiento que nunca me hubiera podido permitir; a la gente que ha padecido cáncer y que no lo ha superado, pero que ha dado su cuerpo para que personas como yo en el futuro pudieran ser curadas». «Y, en especial, vuelvo por toda esta estima que he recibido por todos y por todas ustedes», ha concluido dirigiéndose a sus compañeros de la Cámara, que han aplaudido en pie. Ya cuando ha entrado en el hemiciclo ha recibido una salva de aplausos.

El síndic de Compromís, Joan Baldoví, le ha entregado un ramo de flores. Lágrimas de unas y de otros. El jefe del Consell, Carlos Mazón, ha difundido un mensaje en sus redes en el que da su «más afectuosa bienvenida» a Mas en su vuelta «a esta, su casa. De corazón me alegro de tu vuelta y te deseo lo mejor en tu recuperación». Se ha tratado del momento más noble y humano de la sesión, donde situaciones de ese tipo, desgraciadamente, no abundan.