Una ex alto cargo de Camps evita la cárcel por Gürtel tras pactar con la fiscal

El verano, un periodo de baja intensidad judicial, también depara algunas sorpresas. Una ex alto cargo del gobierno de Francisco Camps ha pactado con la Fiscalía Anticorrupción para evitar el ingreso en prisión en caso de una eventual condena en el caso Gürtel, la última pieza con vinculación valenciana que falta por juzgar.

La vista arranca el próximo mes de enero, pero Anticorrupción lleva meses trabajando en posibles conformidades que, en definitiva, aligeren la vista y quizá compliquen la estrategia de aquellos que se mantienen firmes en su línea de defensa. La primera en aceptar esa conformidad para beneficiarse de un menor castigo ha sido Carmen Quintero, quien fuera la responsable de la Fundación La Luz de las Imágenes.

La mujer se enfrentaba a cinco años y medio de prisión, una amenaza que en caso de materializarse en una sentencia condenatoria puede conducir directamente a la penitenciaría. Suficiente como para reflexionar acerca de si conviene un pacto para reducir posibles riesgos en el futuro. El acuerdo finalmente se ha cerrado en dos años de prisión con la correspondiente suspensión de la pena con la condición de que no vuelva a delinquir. Además, deberá abonar una cantidad por encima de los 30.000 euros, según fuentes conocedoras de la negociación.

Anticorrupción baraja desde hace meses un borrador para los diferentes acusados en el que prácticamente lo único que hay que cambiar son los nombres y cargos. En ese escrito, en caso de firmarse, se acredita que el procesado recibió órdenes de sus superiores para autorizar el pago de un servicio o favorecer a la trama Gürtel en una adjudicación. No se concreta la identidad de ese superior.

La causa es una más de las piezas de Gurtel, la última con nexo valenciano después del conocido como caso Fitur, con condenas durísimas para los investigados, entre ellos, la expresidente de Les Corts Milagrosa Martínez (9 años de cárcel).

En este macroproceso también destacan los juicios por la financiación ilegal del PP, que terminó con condenas para nueve empresarios. La confesión de Ricardo Costa, el exvicesecretario del PP, que reveló todo un entramado delictivo para costear los actos del partido e implicó al expresidente Camps también le benefició. Se le rebajó la pena a cuatro años y finalmente gracias a su colaboración con la Justicia no llegó a ingresar en prisión.

Además, su testimonio permitió encausar al expresidente Camps en la pieza que ahora se va a juzgar. Ambos, los dos hombres fuertes de la última etapa triunfal del PP, compartieron banquillo de acusados en la conocida como causa de los trajes. Fueron declarados no culpables. Pero su amistad no se mantuvo con el paso de los años.

Existen dos grupos principales de acusados en la pieza de Gürtel, aquellos que se enfrentan a penas de prisión y los que sólo están acusados de prevaricación, delito que sólo está castigado con la inhabilitación. Desde este punto de vista, los segundos, donde figuran tres exconsellers del PP como Alicia de Miguel, Luis Rosado y Manuel Cervera, se niegan a conformarse. Una hipotética condena, en realidad, no supondría un quebranto a sus vidas.

El resto, entre los que figura Quintero, sí lo tienen más complicado. Dos de ellos han fallecido a lo largo de todo este proceso, que comenzó hace cerca de nueve años. Se trata del ex director general de Vaersa Juan Miguel Bellver y del jefe del área de comunicación de esa empresa pública, Antonio Santo Juan.

El juicio amenaza con convertirse en munición electoral. Las sesiones arrancan en enero, pero hay señalamientos hasta el mes de mayo. Es decir, en plena campaña electoral de las autonómicas y municipales. Unos comicios donde las encuestas vuelven a señalar un empate entre bloques.

Los magistrados que enjuiciarán los hechos serán el presidente José Antonio de Mora, junto con su compañero Fernando Andreu, mientras que la ponente será María Dolores Hernández Rueda. Se da la circunstancia de que esta última ha desarrollado parte de su carrera en la Audiencia de Valencia.

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