Arrimadas acusa a Sánchez de «romper todos los puentes» con el constitucionalismo

La portavoz de Ciudadanos en el Congreso, Inés Arrimadas, ratificó este martes la oposición de su grupo a la investidura de Pedro Sánchez, al que ha acusado de «romper todos los puentes con el constitucionalismo». «No le ha votado ni un solo español para hacer lo que está haciendo usted aquí», aseveró.

La líder 'in pectore' de los liberales reclamó por última vez a los diputados del PSOE romper la disciplina de voto y votar en conciencia contra la investidura de Sánchez. Arrimadas puso de nuevo como ejemplo a la portavoz de Coalición Canarias, Ana Oramas, que desoyó a la cúpula de su partido y optó por votar en contra de la investidura del candidato socialista. También se refirió a la decsión de la hoy presidenta de la Cámara baja, Meritxell Batet, de saltarse en el pasado las directrices del partido en una votación en la que el PSC defendió una consulta independentista en Cataluña.

En su intervención, la dirigente naranja afeó al jefe del Ejecutivo en funciones que permaneciera «impasible» mientras los nacionalistas insultaban al Rey. Acusó además a Sánchez de haber «regalado» a Esquerra una consulta solo en Cataluña mientras los indepedentistas le están diciendo claramente, y en su cara, que «les importa un comino la gobernabilidad de España».

La portavoz parlamentaria de Ciudadanos recordó a Sánchez que existía una alternativa y que él evitó desde un principio buscarla. «Podría haber aislado a los nacionalistas y a los radicales», lamentó Arrimadas, que echó en cara al presidente en funciones haber «despreciado» a los votantes constitucionalistas para «hacer la pelota» a los soberanistas.

A diferencia que la pasada legislura, cuando la formación liberal apuró el plazo para tender la mano al líder socialista y evitar así una repetición electoral, Ciudadanos ha defendido desde el 10-N un Gobierno en solitario del PSOE con su apoyo y el del PP en los grandes pactos de Estado. Una opción que Sánchez, en opinión de Arrimadas, no se ha llegado a plantear porque quiere cavar trincheras» y, para ello, necesita «extremos». « Es la gasolina de su proyecto», remarcó.

Para los liberales, pactar con el PNV o Esquerra Republicana de Catalunya no es «progresismo» como defienden los socialistas, sino «desigualdad, nacionalismo y sanchismo». De ahí que Ciudadanos augure que el nuevo Gobierno no dará «estabilidad» ni «prosperidad» a España. «Ya que habla de Azaña –le recordó Arrimadas a Sánchez–, aprenda de él y no haga a España repetir los mismos errores del pasado».