M. H/H. E.
Viernes, 7 de febrero 2020, 00:58
La salida de Empar Marco de la dirección general de À Punt abre un periodo de incertidumbre en su equipo de confianza. Alfred Costa ha presentado un cronograma con los pasos a seguir en la renovación de los órganos decisión, con la incorporación del equipo directivo y una reorganización interna del organigrama previsto para abril. Previamente, para marzo, está prevista la convocatoria de bolsas para directivos.
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Una vez Les Corts ratifiquen la elección de Alfred Costa, el nuevo director de la cadena pública tiene la potestad de destituir. El artículo 23 de la ley del Servicio Público de Radiodifusión y Televisión de Ámbito Autonómico establece en su apartado c) que entre las funciones de la dirección general está el nombramiento y destitución del personal directivo de las sociedades dependientes de la Cooperación. Actualmente, de los cuatro puestos hay tres ocupados por César Martí (Contenidos), Remei Blasco (Informativos) y Carolina Marín (Administración), personas de confianza de Empar Marco, que hasta el miércoles por la mañana seguía tomando órdenes como directora.
Uno de los problemas que remarca el nuevo director general en su proyecto es que existe una ausencia de políticas de comunicación interna entre departamentos, «muchas veces relacionadas con la no asunción de responsabilidades en la toma de decisiones y menguando la capacidad de iniciativa. No se generan entornos de confianza donde compartir estrategias y generar sinergias. La consecuencia final es la desafección».
Costa busca «un cambio de filosofía» en la cadena «de actitud y aptitud» de los equipos directivos y de los trabajadores. En las debilidades del actual organigrama remarca la ausencia de dirección estratégica en el apartado tecnológico, con una estructura interna poco eficaz y sin estar los roles definidos entre los distintos mandos. Además, considera que no hay planificación estratégica y falta de comunicación para captar las distorsiones laborales.
El nuevo director de À Punt es trabajador del medio y lanza en su informe mensajes demoledores que ponen de manifiesto la verdadera situación interna que se vive en la cadena entre los trabajadores: «Hay más empleados de los que pensamos que no saben qué funciones tiene asignadas otros compañeros por áreas». Costa remarca a lo largo de su informe que flota en el aire de la cadena valenciana un clima de pesimismo entre la plantilla.
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