Bielsa no seguirá como vicesecretario general de la ejecutiva del PSPV

Bielsa ocupa la vicesecretaría general desde el pasado mes de marzo, cuando el congreso extraordinario del PSPV eligió secretaria general a la ministra de Ciencia y, en el acuerdo para retirar sus candidaturas, elevó a Alejandro Soler a la presidencia del partido y al propio Bielsa a esa vicesecretaría que, sobre el papel, equivaldría al número dos de la dirección del partido.

Sobre el papel quizá sí. La realidad, casi un año después, es que Bielsa ha podido comprobar en primera persona lo que ya se intuía. Que una vicesecretaría general es una responsabilidad con competencias e influencia siempre y cuando así lo decida la secretaria general. Y esa decisión no ha ocurrido. El alcalde de Mislata no ha tenido un solo minuto de visibilidad, no ha sido el elegido por el partido para valorar un solo resultado electoral, no ha tenido, en definitiva, el protagonismo que el cargo en cuestión podría llegar a tener.

A cambio, también es cierto, Bielsa ha jugado a la contra de la dirección de Morant, tratando de tumbar a algunos de sus miembros más destacados, como el secretario de Organización Vicent Mascarell o el responsable de Política Municipal, Jordi Mayor, con cargos también en la dirección provincial de Bielsa.

En todo caso, la conclusión que parece más evidente es que Bielsa parece decidido a resistir. «Va con todo», se asegura desde su entorno, que insiste en el convencimiento de que el portavoz socialista de la Diputación se presentará sí o sí a la reelección, y que ese escenario no lo modificará ni la presentación de un candidato alternativo ni la eventual presión que pudiera llegar desde el PSOE.

Esa eventual presión, que algunos cargos socialista manejan como hoja de ruta más inmediata, trataría de evitar un congreso de confrontación en la provincia de Valencia, precisamente ahora que el impacto de la dana y la gestión por parte de la administración popular ha abierto una puerta a los socialistas para recuperar la hegemonía electoral para la izquierda valenciana. El choque entre dos candidatos puede no ser el mejor escenario para propiciar esa opción, aunque como sostiene el entorno de Bielsa, es él quien ocupa el liderazgo provincial, y si se presenta otro candidato será con el aval de la ejecutiva de Morant.

Para Bielsa, además, retirar su candidatura resulta probablemente la única opción que no puede contemplar. Ya lo hizo hace ahora un año en el congreso extraordinario que eligió a Morant, y sus colaboradores y núcleo más cercano no entenderían una nueva renuncia. Ni siquiera, probablemente, a cambio de negociar la composición de la nueva ejecutiva o de alcanzar varios puestos de responsabilidad en la dirección de Morant. No repetir como vicesecretario general sería el más destacado, y Bielsa ya ha anticipado que no lo hará.

Las direcciones nacional y provincial de Valencia esperan una conversación «en las próximas horas» entre Morant y Bielsa que contribuya a aclarar la situación. La candidatura que Raga puede presentar la próxima semana encierra también algunos riesgos para Morant. Lo ajustado que podría llegar a ser el resultado si hay primarias no sólo evidenciaría la división interna, sino que podría llegar a propiciar una derrota para el candidato afín a la dirección de Morant, que dejaría tocado su liderazgo.