burguera
Viernes, 4 de diciembre 2020, 00:47
La presidenta del PP en la Comunitat (PPCV), Isabel Bonig, compareció ayer junto al presidente de la Diputación de Alicante y del PP en esta provincia, Carlos Mazón, tras reunirse y poner en común planteamientos sobre impuestos en la Comunitat. La entrevista y la presencia pública conjunta de ambos líderes generaba «morbo«, según admitieron fuentes populares, por ser considerado Mazón como una especie de Plan B de Génova si la dirección nacional no se siente convencida del liderazgo de Bonig. Se plantaron ante los periodistas con gesto cordial, intercambiaron bromas y el presidente de la Diputación alicantina evitó en todo momento arrogarse mayor protagonismo del que se le pidió al ser interpelado.
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Bonig y Mazón aseguraron que el PP aplicará rebajas fiscales en las instituciones valencianas en las que gobierna frente a «la evolución fiscal que se avecina desde el Gobierno» central y el «tripartito» de la Generalitat. Mazón puso de ejemplo su intención de reducir a la mitad el recargo del IAE en la Diputación de Alicante, lo que Bonig alabó. El dirigente alicantino negó rivalidad con la presidenta autonómica («nada, no hay tema») y se descartó abiertamente a presentar candidatura alternativa a la que la síndica popular en Les Corts ya ha anunciado que encabezará para renovar su mandato. Mazón dijo ignorar de dónde salen las noticias relativas a la pujanza de su figura, cuáles son las fuentes en el PP que así lo señalan, y lo atribuyó a intrigas. Bonig aseguró que su relación con el presidente provincial es «magnífica». Y quisieron exhibir coincidencias y complicidad al arremeter al alimón contra el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y su presencia esta semana en Barcelona.
Bonig calificó de «tontería» la idea de 'Commonwealth' (mancomunidad de naciones) mediterránea apuntada por el jefe del Consell. «No paro de reírme. Hay que ser ingenioso e incompetente. No sé si me atrevería, si yo fuese presidenta de la Generalitat, a decir semejante tontería», aseveró la líder popular, quien lamentó que Puig plantee esa cuestión «cuando la gente pierde su vida y su patrimonio» por la pandemia. Bonig acusó al jefe del Consell de hacer piña con «los que quieren romper España», en relación a ERC y el Govern catalán, y consideró que «la izquierda, el PSPV y Compromís, prefieren ser catalanes de segunda que valencianos de primera».
Mazón no le fue a la zaga, y lamentó que «cada vez que el tripartito se va a Cataluña es para vasallaje», reclamó que en esa «afición» a «visitar a las comunidades vecinas», se rinda «menos pleitesía a los independentistas» y se «baje más a Murcia a defender el Tajo-Segura que el tripartito del Consell no defiende nunca».
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