Carlos Flores: en el ojo del huracán, también en Les Corts

La socialista Mercedes Caballero, vicepresidenta de la comisión a la que Flores Juberías acudió (a propuesta de Vox, y en calidad de catedrático de Derecho Constitucional y ex miembro del Consell de Transparencia) decidió que no se sentaba a su lado. Se levantó de la mesa que preside la comisión y se fue junto al resto de diputados del PSPV. Eso fue el principio, antes de empezar, pero hubo más. Durante e incluso después.

Flores Juberías iba a ser vicepresidente de la Generalitat. Finalmente lo es Vicente Barrera porque, aunque el matador de toros no se postuló, «hay unos hechos que todos conocemos», según explicó en una entrevista reciente. La sentencia por maltrato psíquico a su exmujer alejó a Flores Juberías del Consell, para «suerte» del PP, según reconocen sus dirigentes, porque el voxista no mira pelo cuando debate. Mazón se hubiera tropezado con un problema de calibre similar al que tiene Catalá con Badenas en el Ayuntamiento de Valencia. Sin embargo, el catedrático de Derecho Constitucional acabó en el Congreso y este lunes ha participado en la comisión que recibía a expertos propuestos por los partidos para hablar de la futura ley de transparencia. A Flores Juberías hay varios artículos de la nueva legislación, propuesta por PP y Vox, que le rechinan. La modificación le parece «innecesara», tanto como la que hizo en 2022 el Botánico. Criticó el abandono al que está sometido el Consell de Transparencia, algo que había hecho Bolinches una hora antes, reprochando a los diputados el modo en que han ninguneado al organismo. Antes de comparecer, Flores Juberías ya lo comentó a los medios de comunicación, que le recordaron que estaba poniendo pegas a una proposición de ley impulsada por su partido, ante lo cual Flores Juberías aseguró que él acudía en su calidad de jurista, no de miembro de Vox. Un verso suelto en toda regla. En la comisión, entre diputados, no hubo tantos distingos.

Tras una primera intervención de Flores Juberías, llegado el turno de Compromís, su diputado Jesús Pla, le afeó que acudiera allí a dar una opinión «de parte», y consideró su presencia como «una provocación». El diputado del PSPV Ramón Abad fue un poco más allá. Abad le recordó que había quedado «exiliado» una vez se puso el foco en la sentencia que le condenó en 2002, y le preguntó «cómo lleva usted el exilio». Los diputados de Vox protestaron. Revuelo. Bronca. Los populares afearon a Abad «la falta de respeto», y el presidente de la comisión, Luis Martínez (del PP), instó a Abad a ceñirse a la cuestión. O sea, a la nueva ley. Protestó el diputado socialista y también Caballero. Minutos de parón. Más bronca. Flores Juberías sonriendo. Finalmente, Abad finalizó su intervención, que era de tres minutos pero que se triplicó, desde las 14.08 horas hasta las 14.17 horas, entre parones y protestas.

Respondió Flores Juberías, «en orden de menor a mayor importancia de las intervenciones» y empezó por Abad, claro, al que le aseguró que no estaba exiliado porque trabajaba en Madrid, no en Waterloo o en Bruselas. Y luego le dedicó un par más de comentarios. Al finalizar su intervención, Caballero, Abad y Martínez tuvieron sus más y sus menos, una discusión a cuenta de si debía ceñirse el socialista a la cuestión o preguntarle al compareciente lo que desease. Mientras, Flores Juberías abandonó la comisión, alborotada, como suele ocurrir con todo lo concerniente con el diputado y catedrático.