

Secciones
Servicios
Destacamos
burguera
Viernes, 9 de abril 2021, 13:31
El escaso interés de la dirección nacional de Ciudadanos por tejer liderazgos orgánicos consistentes en los diferentes territorios del país ha vuelto a quedar en evidencia, en el caso de la Comunitat, tras la precipitada salida de Toni Cantó en dirección a Madrid y al PP. La cúpula dirigente de la formación que encabeza Inés Arrimadas precisó de un par de semanas para decidir quién sucedería como síndic en Les Corts al actor y ahora candidato de los populares madrileños. Finalmente, se decantaron por Ruth Merino. Sin embargo, en lo que se refiere a la figura del coordinador de Cs en la Comunitat, parece que el asunto se lo van a tomar con mucha calma. Fuentes naranjas admiten que no será una decisión que se vaya a tomar a corto plazo. De hecho, se baraja que este limbo durará hasta ver qué ocurre con las elecciones en la Comunidad de Madrid.
No será la primera vez que la dirección orgánica de Ciudadanos en la Comunitat se sitúe en una especie de indefinición en cuanto a su liderazgo. Es una situación que se ha dado anteriormente sin que desde la formación valenciana se logre articular una explicación demasiado concreta. En realidad, ninguna explicación. Simplemente, esperan instrucciones de la dirección nacional, que está en otras cosas.
Cantó pasó mucho más tiempo esperando ser confirmado como coordinador del partido que ejerciendo oficialmente como tal. Año y medio de espera. Su liderazgo oficial se desarrolló durante apenas medio año. Sólo a finales de septiembre del año pasado fue designado como coordinador desde la dirección nacional. Finales del pasado mes de septiembre. Entonces, ya loaba en Les Corts las políticas que su partido, en ese momento (Ciudadanos), y su partido, en este momento (PP), implementaban en Madrid. A mediados del pasado mes de marzo tomó las de Villadiego. ¿Y antes? Cantó llegó a la Comunitat a ejercer de jefe sin mando en plaza. Era un líder conocido y reconocido (también criticado), pero sin haber recibido oficialmente los galones cuando en abril de 2019 logró encabezar una lista electoral que sacó 18 escaños en Les Corts. Lo celebró como un campeón, pero no pudo ni levantar una copa honorífica, al menos a nivel orgánico, hasta septiembre.
Y eso que en noviembre de 2019, cuando Ciudadanos logra un resultado tan terrible en las elecciones generales que Albert Rivera dimite, Cantó ya se dejó ver, y mucho, en asuntos orgánicos. En la Comunitat, oficialmente, no había nadie al volante del partido. Cantó volvió a postularse. Lo hizo de un modo muy agresivo, ironizando y menospreciando al todavía portavoz autonómico del partido, Fernando Giner. «¿Quién es el portavoz autonómico?», preguntó una mañana en Les Corts, haciendo como que no lo sabía, y añadió: «Llevamos más meses de los que yo hubiera querido sin que el comité autonómico se reúna. Hemos estado tensionados por las elecciones». Giner había dado un discreto paso a un lado al ver que Rivera apostaba por Cantó como candidato a la Generalitat, pero eso no se había traducido todavía en una designación oficial. La relación entre Cantó y Giner era muy mejorable. El actor no le tenía en gran consideración. El portavoz municipal no se fiaba de él.
Pasaron diez largos meses hasta que Arrimadas por fin le otorgó a Cantó los galones de portavoz. Sin embargo, Cantó se ha mudado aparatosamente y después de arremeter con dureza contra Arrimadas. Sus críticas fueron respondidas por Giner. Anonadados se han quedado en su grupo parlamentario, donde todavía tienen una sensación de irrealidad cuando le ven defendiendo a brazo partido los postulados del PP. El puesto de coordinador autonómica valenciano de Ciudadanos ha quedado vacante y cuando se pregunta por esa ausencia de liderazgo orgánico todo el mundo mira hacia otro lado.
Durante los dos últimos años, coincidiendo con la deriva del partido a nivel nacional, el engranaje orgánico de Ciudadanos en la Comunitat, lejos de consolidarse, se ha desestabilizado. Primero, y de manera muy pausada, para adecuarlo a Cantó, y desde hace unas semanas, tras la estampida del ahora candidato del PP en Madrid. Precisamente, las elecciones madrileñas aparecen como la fecha tras la cual en la dirección nacional terminan de resolver el vacío dejado por Cantó.
Como suele ocurrir ante las incertidumbres políticas en un partido, llega el tiempo de las quinielas. Fernando Giner podría volver a ser el coordinador en la Comunitat, si bien no se ha postulado con gran entusiasmo para el puesto. María Muñoz suena con fuerza. La diputada valenciana es amiga personal de Cantó, si bien ayer en las redes sociales discrepaba sobre las opiniones del hasta hace menos de un mes síndic de Ciudadanos en Les Corts. De hecho, Muñoz estaba llamada a ser la número dos de la lista de Cantó en Valencia para las elecciones autonómicas de 2019. Hasta había acondicionado buena parte de su vida personal con ese motivo durante los meses previos a esos comicios. Sin embargo, el adelanto electoral anunciado por Pedro Sánchez modificó los planes de Ciudadanos. Rivera la situó como número 1 en la lista de su partido en Valencia para el Congreso. Quizá finalmente sí se venga a la Comunitat. Todas esas especulaciones no se resolverán en los próximos días. Habrá que esperar, según varias fuentes del partido.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.