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La firma del pacto del Botánico a nivel autonómico y su extensión a la mayoría de los municipios valencianos donde la izquierda cuenta con más concejales que la derecha ha llevado a Compromís a estar en muchas ocasiones en la sombra del PSPV, que es el partido que encabeza la mayoría de los gobiernos. Esta situación ha llevado a los nacionalistas a trazar una estrategia en Les Corts que les permita diferenciarse de sus socios socialistas ya que pese a la caída en votos de las pasadas elecciones autonómicas quieren seguir posicionándose como una alternativa real al PSPV dentro del espectro de la izquierda.
Esta posición quedó patente durante un desayuno informativo que protagonizó ayer Fran Ferri, portavoz de Compromís en Les Corts, en donde presentó las líneas básicas en las que se basará su trabajo esta legislatura. Tal y como estaba previsto, Ferri anunció en este encuentro la propuesta de tasa turística. Un impuesto que ya presentó en su día Podemos y que fue vetado por ellos mismos y el PSPV pero que ahora recuperan con la diferencia de que quieren eliminar el tramo que corresponde a la autonomía y dejar libertad para implantar la tasa a cada municipio. Este movimiento es para Compromís una forma de buscar una «posición de consenso» ya que 'descafeina' la postura de Podemos. Sin embargo, desde el PSPV siguen sin tener clara la medida pese a la intención de los nacionalistas de tratar de aprobarla antes del final de año.
Los impuestos es otro tema que divide a los socios. Los socialistas, en determinadas comunidades, han apostado por una rebaja fiscal y el presidente Ximo Puig anunció que elevará del 95 al 99% la exención del impuesto de sucesiones para empresas familiares. Una apuesta que para Ferri hace contradecirse al jefe del Consell por su crítica a la baja fiscalidad de autonomías como Madrid, que consideró que realiza «dumping fical». «No estamos para bajar impuestos» sentenció el portavoz de Compromís.
El tercer punto de discordia más destacado es el que hace referencia al acuerdo de la Unión Europea con los países latinoamericanos que integran Mercosur. Un pacto que ya ha enfrentado a la consellera de Agricultura y dirigente de Compromís, Mireia Mollà, con la eurodiputada socialista Inmaculada Rodríguez Piñero. Desde el partido nacionalista se defiende que este pacto volverá a ser perjudicial para la citricultura valenciana mientras que el PSPV lo considera beneficioso. En este sentido, Compromís pidió la comparecencia en el Congreso del ministro en funciones de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, para que explique cómo afectará el nuevo tratado.
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