48.433 millones de deuda y 2.194 de déficit: las cifras del colapso financiero valenciano

La Generalitat pudo comprobó este martes, con datos oficiales, la magnitud del colapso financiero que atraviesa. El Banco de España, con las cifras de deuda pública, y la Intervención del Estado, con las del déficit, retrataron el cierre del ejercicio presupuestario de 2019. En ambos casos, la administración autonómica empeora los resultados de hace un año.

Por orden. El órgano regulador situó la deuda pública de la Comunitat Valenciana a 31 de diciembre en 48.433 millones de euros. La cifra es la más alta de la serie histórica para la región y supone un incremento de 556 millones respecto a los datos del trimestre anterior. Con estas cifras, los números rojos de las cuentas autonómicas se acercan peligrosamente a la barrera psicológica de los 50.000 millones de euros, superada únicamente por Cataluña.

Los datos conocidos ayer revelan un incremento constante de la deuda valenciana. Desde junio de 2015, cuando el Botánico llegó al gobierno de la Generalitat, hasta el cierre de 2019, la deuda de la Comunitat se ha incrementado en 8.370 millones de euros. Entre las causas principales, el permanente recurso al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) del Ejecutivo central, que si bien sirve de oxígeno financiero a la administración autonómica, al ser un préstamo engorda la deuda pública acumulada.

La deuda valenciana, calculada por habitante, señala que cada valenciano tendría que abonar 9.689 euros para cancelar el total de de esos números rojos. En términos absolutos, la Comunitat ocupa el segundo lugar de todas las autonomías -sólo por detrás de Cataluña, que llega a 79.060 millones, y por delante de Andalucía (35.431) y Madrid (33.469)-. En términos relativos, la valenciana es la región cuya deuda representa mayor porcentaje de su riqueza económica -42,1% del PIB-, por delante de Castilla-La Mancha (34,95%) y Cataluña (33,4%).

La conselleria de Hacienda recurrió al manual para valorar los datos. Fuentes de ese departamento señalaron que el incremento de la deuda obedece a la infrafinanciación que sufre la Comunitat Valenciana. De hecho, se incidió en que los 1.351 millones de euros del incremento anual son «prácticamente coincidentes con los 1.325 millones reivindicativos que anualmente incluye el Consell en los presupuestos de la Generalitat».

Con todo, Hacienda sacó pecho de la reducción de tres décimas del dato relativo de deuda, desde el 42,4 % del año 2018, hasta el 42,1 % en 2019.

Pese a reconocer el incremento de 8.370 millones de los números rojos desde junio de 2015, el departamento que dirige Vicent Soler remarcó que «el 31 % (2.589 millones de euros) corresponde a déficit de la etapa anterior o deriva de decisiones adoptadas por el anterior gobierno».

Entre estas actuaciones de la etapa anterior que han conllevado un incremento de la deuda en la etapa del Govern del Botànic cabe destacar los 1.468 millones de euros de deuda que llegaron vía préstamos del FLA dirigidos a cubrir la desviación del déficit de 2014 y ejercicios anteriores.

Si el día ya venía mal con los datos de la deuda pública, los del déficit que se conocieron poco después los terminaron de arreglar. La Comunitat cerró 2019 con 2.194 millones de gasto más que de ingresos. es decir, un déficit del 1,91% del PIB, pese a que el límite pactado por el gobierno y las CCAA para todo el año se situaba en el 0,1% de la riqueza de cada región.

El dato del déficit confirma las peores expectativas de todos los organismos. La Comunitat no sólo consigue el peor registro de todas las CCAA, sino que supera incluso los 2.000 millones de euros de desequilibrio entre lo que ingresa y lo que gasta. De los 6.795 millones de euros de déficit de todas las CCAA, 2.194 ya son de la Comunitat Valenciana. La segunda región con peor déficit es Cataluña, y se queda en 1.329 millones de euros. El agujero valenciano representa el 32% del total.

El ministerio de Hacienda explicó, no obstante, que las cifras del déficit autonómico real -así las calificó una fuente del departamento que dirige María Jesús Montero- se veían modificadas si se descontaba el impacto provocado por la liquidación del IVA de 2017 como consecuencia de la implantación del Suministro Inmediato de Información (SII) para abonar a las CCAA el desfase de un mes de IVA. «El Ministerio de Hacienda se comprometió a descontar el efecto del SII a la hora de computar el cumplimiento del objetivo de déficit de las CCAA en 2019, que está fijado en el 0,1%», señaló el departamento de Montero en un comunicado. Con ese descuento, el déficit de la Comunitat se habría quedado en 1.964 millones de euros, el 1,71% del PIB. Una leve mejoría que no alteraría la condición de autonomía con peores datos y la distancia sideral con el 0,1% de tope pactado inicialmente.

Cualquiera de los dos datos empeoran los registros de déficit correspondiente a 2016 (1,49%), 2017 (0,81%) y 2018 (1,42%).