

Secciones
Servicios
Destacamos
burguera
Miércoles, 14 de octubre 2020, 08:07
La Comisión de Reglamento de Les Corts se reunió ayer por primera vez desde el inicio de la legislatura. Han pasado un año y cinco meses. PSPV, Ciudadanos, Compromís y Vox han manifestado durante todo este tiempo su deseo de reformar el funcionamiento de la Cámara. Así que por fin, a propuesta del presidente del parlamento, Enric Morera, los grupos acordaron ayer la elaboración de una propuesta de un cambio del articulado, vigente desde hace 15 años, en base a las propuestas de los grupos, que se organizarán a partir del lunes para confeccionar una ponencia que esté acabada antes de la segunda mitad del año próximo.
Todo fueron buenas intenciones ayer, expresadas por los portavoces de los grupos, algunos de ellos demostrando un despiste importante sobre cómo reformar el Reglamento. Entre los más duchos en el asunto están los populares, que se mostraron vigilantes frente a las propuestas de Compromís y PSPV, que deslizaron ayer sus deseos de «agilizar» las votaciones y permitir la compatibilidad de los diputados con otras actividades. Un eufemismo para no tropezar con el rechazo frontal de la oposición por su deseo de que las votaciones se agrupen de tal modo que los consellers puedan acudir sólo los jueves a los plenos de Les Corts, atender entonces a las interpelaciones (ahora tienen que ir los miércoles) y acudir a una hora concreta para votar los puntos a debatir, pugnas muy igualadas esta legislatura porque el bloque de derecha y el de izquierda están separados por muy pocos escaños y todos los votos son vitales, incluidos los de los consellers que no quieren renunciar al escaño. El vicepresidente segundo podemista, Rubén Martínez Dalmau, y el conseller de Hacienda, Vicent Soler, sí liberaron su acta de diputado. Pero otros altos cargos del Consell como Oltra, Marzà, Climent, Barceló, Pérez Garijo o Bravo mantienen el escaño. Trabajo como parlamentarios no hacen, pero su presencia es necesaria para que el Botánico no pierda las votaciones. Así que socialistas y nacionalistas han pensado que si se modifica el Reglamento será más fácil no tener apreturas para aprobar sus leyes y rechazar las iniciativas de la oposición. De paso, las agendas de los consellers se despejan: miércoles, libre de acudir a la Cámara. Un traje a la medida del Consell. El PP, por boca de la diputada popular María José Catalá, señaló en su turno de intervención que están de acuerdo en modificar el reglamento «siempre que sea para servir mejor a la ciudadanía y no para que los miembros del Botánico vivan mejor», en relación al gobierno tripartito PSPV-Compromís-Unides Podem.
La última reforma del Reglamento se abordó en 2006, cuando el paisaje de los partidos parecía inalterable: los dos grandes (socialistas y populares) y uno o dos formaciones con una presencia casi residual. Sin embargo, el bipartidismo se moduló de manera notable a partir de 2015, cuando entró un quinto partido y las fuerzas se igualaron. Desde 2019 son media docena de formaciones y la cantidad de escaños aún se ha equiparado más. Además, si finalmente se aprueba una nueva ley electoral y se modifica el listón para obtener representación (se rebaja del 5% al 3%), la posibilidad de que el número de grupos aumente es mayor. Toda esa fragmentación necesitará de un cambio del Reglamento para agilizar los turnos de intervención.
El grupo de trabajo incluirá todas las observaciones que hagan los letrados de Les Corts para mejorar el texto, modificar los aspectos que puedan inducir a error o contradicción o que ya se hayan articulado mediante las resoluciones de presidencia o los acuerdos unánimes. Precisamente, la asesoría legal, jurídica, de las iniciativas de los grupos parlamentarios también se quiere mejorar. Actualmente, los partidos elaboran propuestas de ley sin demasiadas garantías de que están legislando de manera acorde con normas de rango superior.
«El trabajo que empieza ahora puede ser importante para actualizar, 15 años después, las normas por las que nos regimos en el parlamento valenciano«, resaltó ayer Morera. Los grupos admitieron la necesidad de introducir cambios que permitan solventar situaciones como la generada a raíz de la pandemia, el voto y la participación telemática de los diputados. Les Corts mantiene modos de trabajar casi decimonónicos que el propio Morera ha intentado cambiar durante años. Sin éxito. La resistencia interna es importante. De modo que urge un cambio en el Reglamento para cosas como difundir los gastos y las cuentas de los grupos parlamentarios con transparencia.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.