Les Corts corrige la hoja de ruta del Consell y pide retomar el teletrabajo

Más de un mes después de que se pusiera fin al estado de alarma y, con ello, se decretara la vuelta al trabaja presencial de todos los empleados y empleadas públicos de la Generalitat, el debate sobre la posibilidad de instaurar una parte de la jornada en remoto sigue tan vivo como el primer día. En esta ocasión han sido Les Corts las que han enviado un mensaje al Consell, con la aprobación de una proposición no de ley de tramitación especial de urgencia en la que PSPV, Compromís, Podemos, Ciudadanos y PP piden al Gobierno valenciano que, entre otras medidas, priorice de nuevo el trabajo no presencial para su plantilla pública en plena pandemia.

La resolución, de la que solo quedó al margen Vox, contó con modificaciones al texto inicial pactadas por los grupos que la votaron menos el socialista, y vuelve a poner en valor la resolución firmada por la Conselleria de Justicia el pasado 8 de mayo, en plena pandemia, mediante la cual se establecía como prioritario el trabajo en remoto y se fijaban unos porcentajes de vuelta al trabajo que dejaban abierta la vuelta total a las oficinas en un porcentaje mínimo de un 85%. Dicha resolución, actualmente ya sin efecto en el seno de la Administración, es la que ha sido empleada por los grupos para instar a la Generalitat a que siga profundizando en su proceso de adaptación al teletrabajo con lo establecido en el decreto de 2016 que se aprobó en su día para poner en marcha este tipo de procedimiento laboral. Para ello, los grupos citan también la resolución de Justicia para ir poniendo en marcha el régimen de trabajo a distancia por el que el Consell, además, debe habilitar las herramientas telemáticas, proveer a sus empleados y empleadas de los equipos necesarios y facilitar la adaptación del espacio de trabajo a las casas.

Pero, una de las claves de la resolución de Justicia a la que apelan los grupos, ahora sin efecto, se basa en que cada conselleria se encarga de la organización a nivel administrativo de sus plantillas para poder establecer las medidas de seguridad necesarias para cumplir con las normas de la nueva normalidad. Es decir, atendiendo a lo que piden desde Les Corts, los planes piloto que ya han elaborado algunos departamentos para poder combinar el trabajo presencial con el remoto estaría dentro del mandato que envía la Cámara a través de cinco de sus seis grupos parlamentarios. En la resolución se piden distintas acciones, entre ellas, una guía de adaptación al teletrabajo.

De hecho, desde la dirección general de relaciones con Les Corts ya se ha hecho llegar a las consellerias el texto de la PNL para que la vayan poniendo en práctica. En concreto, el punto cuatro, el que alude a la resolución en la que se recomienda el teletrabajo es competencia exclusiva de Justicia.

El departamento que dirige Gabriela Bravo, donde residen las competencias de Función Pública, ya tiene en fase de consulta previa un nuevo decreto que permita que el teletrabajo constituya un elemento organizativo más a tener en cuenta en la gestión de los efectivos de personal de la Generalitat. Y es que desde que en 2016 se aprobó el actual, no se había desarrollado su aplicación. Por eso, en mitad de la pandemia, cuando se tuvo que mandar a buena parte del funcionariado a trabajar desde casa, no existía norma desarrollada en la que basar su funcionamiento. Y es que desde Justicia siempre se han mostrado a favor de este sistema, pero una vez esté en marcha, y defienden que lo que se ha producido durante la crisis del coronavirus no era teletrabajo regulado, sino trabajo no presencial.