La derecha redobla sus esfuerzos de dejarse ver en Fallas

De forma distinta, con la tranquilidad de quien se cree ganador o el desespero de quien se ve al borde del naufragio, pero la derecha que lucha por arrebatarle la vara de mando a Ribó ha decidido redoblar los esfuerzos para dejarse ver por las Fallas. La portavoz en el Congreso de los Diputados y secretaria general del PP, Cuca Gamarra, acompañó este jueves a la portavoz del PP y candidata a la Alcaldía del Ayuntamiento de Valencia, María José Catalá; y al presidente de la Diputación de Alicante y candidato a la Presidencia de la Generalitat, Carlos Mazón, en un recorrido por varias fallas de la ciudad. Lo mismo hizo el eurodiputado y secretario general de Ciudadanos, Adrián Vázquez, auspiciado por el portavoz municipal y candidato a la Alcaldía, Fernando Giner. Vázquez incluso se animó con una traca que disparó en Pelayo.

Cabe recordar que esta misma semana se han dejado ver por aquí el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida. Contrasta con la decisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que no se ha atrevido con la mascletà, consciente de que podría ser recibido con cajas destempladas. El PP sabe que Valencia es una plaza capital en sus aspiraciones para recuperar la Moncloa y también sabe que el viento sopla a favor: impulsado por esa ley no escrita que dice que cada ocho años toca cambio en el Gobierno, y por las encuestas que les dan posibilidades reales de conseguir tanto la presidencia de la Generalitat como la alcaldía de Valencia, sus cargos han perdido el miedo a pasear por las calles que tenían en 2019. Ahora se dejan ver y ser vistos y por donde van, reciben alabanzas. También alguna que otra crítica, pero sobre todo alabanzas.

Gamarra, Catalá y Mazón acudieron este viernes a las comisiones Plaza de la Mercé y Sueca-Literato Azorín, donde departieron con los falleros. Los dos políticos valencianos sirvieron de cicerones de Gamarra, a la que explicaron la idiosincrasia de la fiesta. En la primera comisión los falleros estaban a punto de salir hacia la entrega de premios, pero los tres 'populares' fueron bien recibidos. En Ruzafa, por su parte, se quedaron a comer. Lo que decíamos. El viento sopla a favor, pero además Catalá y Mazón han sabido entender lo que en su momento entendió a la perfección Rita Barberá: sin calle, no hay despacho.

Adrián Vázquez, mucho más desconocido por estos lares, también se dejó guiar. Acudió junto a Giner y varios concejales a las comisiones Convento Jerusalén y Pelayo. En esta última se interesó por lo que había ocurrido con su falla, de la que el artista encargado únicamente entregó unos pocos. Ahí, como hiciera antes Almeida, Vázquez se animó con el lanzamiento de una traca. Además, fue a la comisión Reina-Paz-San Vicente, de donde es fallero el concejal Narciso Estellés. «Estoy abrumado», reconocía en el balcón poco antes del inicio de la mascletà, que presenció, así como la Ofrenda, donde, por cierto, desfiló el mismo Giner.

La visita de Vázquez, además de en clave de apoyo a un Giner del que no se puede decir que no esté echando horas a su intento de conseguir representación municipal, hay que leerla sin perder de vista lo que está ocurriendo en la Diputación de Alicante. El desembarco de un cargo tan importante a nivel interno podría tener que ver con esos fuegos que se le prenden en la bodega al buque naranja y que amenazan con hacer naufragar el proyecto liberal.

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