Oltra se atrinchera y no dimite

La vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, se atrinchera. No dimite y no tiene intención de hacerlo. Se aferra a la primera frase de un párrafo del auto del TSJ por la cual está imputada por, presuntamente, trazar un plan para que su conselleria tapase los abusos de su exmarido a una menor. «Esta cacería parte de la extrema derecha», ha insistido Oltra, y reproduce las palabras de un tuit del abogado de la menor abusada: «Este señor fascista es eso: me la voy a follar sin tocarle un pelo».

«No les digo lo que me apetece hacer a mí personalmente, pero esto es una cuestión política y esta gente no puede ganar», ha indicado la vicepresidenta, quien además ha afirmado que se siente apoyada por el Consell.

«Al resto del auto responderé en sede judicial, en cualquier caso no me parece verosímil que haya trece personas mintiendo para protegerme a mí y perjudicarse a ellos», ha señalado Oltra.

La vicepresidenta ha asegurado que «no es la primera vez que me imputa el TSJ. Antes fue por defender el Cabanyal y el patrimonio histórico. He sido expulsada de Les Corts por negarme a aceptar el abuso de poder. Llegué al Consell y escogí Políticas Inclusivas, que no es lo más fácil pero que es lo que le da sentido a la política. Soy consciente de que todas las decisiones que tomamos generan resistencia. Mi trayectoria se basa en oponerme a las injusticias». La líder de Compromís ha incidido en que el auto de imputación del TSJ señala que «no existe prueba directa contra ella», y ha señalado que «la conselleria no ha sido parte ni ha sido oída».

«La verdad no la altera ningún procedimiento judicial. Es una cacería de la extrema derecha y esto no tiene nada que ver con hacer justicia, y la presión la aguantaré porque si no me dedicaría a otra cosa. A mí me presiona más sacar adelante la lista de espera», señala Oltra, para quien insistió «esta es una cuestión política».

No contempla la dimisión en ningún estadio del proceso judicial. La líder de Compromís lo asume como una cruzada política. «Los procesos judiciales no cambian la realidad ni la verdad», ha recalcado Oltra, para quien «la gente sabe lo que hay. El desgaste personal es una cosa, pero el político no considero que exista».

«No es posible, no está pasando que se esté barajando mi destitución», ha señalado Oltra, que se niega en redondo a «especular» con su posible destitución. «No necesitamos hablar de esto. Si tengo que hablar con el presidente será de temas más provechosos», ha indicado la vicepresidenta sobre su relación con Ximo Puig, presidente de la Generalitat.

La vicepresidenta ha recalcado que en los autos condenatorios de su exmarido «la conselleria no fue parte ni fue escuchada», así que, ha admitido que su comparecencia en el TSJ «es una oportunidad, pero 'bonico' no es, y sí, es la primera vez que seré escuchada». Oltra, no obstante, ha intentado no ser imputada y, por tanto, no ser escuchada: «Es que esto no funciona así. Siempre he estado dispuesta a comparecer ante los diputados y los medios de comunicación y lo mismo haré el día 6 de julio ante el tribunal».

«Las trece personas que han comparecido señalaron que no existió ninguna directriz. Es increíble», ha comentado Oltra, quien, no obstante, ha negado que la fiscalía está siendo influida por la derecha y la extrema derecha, una posición que contrasta con lo comentado por Àgueda Micó, la secretaria general del partido Més, el antiguo Bloc.

Oltra niega que esta situación no le permita seguir siendo la portavoz del Consell: «Es obvio que sí me siento capacitada. No me planteo esta cuestión en términos personales, sino que es un asunto político. Hay que saber aguantar la presión y la situación personal».

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