El docente, en el paro y con cursos de formación

En su desembarco en la conselleria, Oltra anunció y presentó a su pareja como educador social. Era un ejercicio de transparencia, una nuevo modo de actuar tras el desalojo del PP. Por eso ahora los magistrados desconfían de que casi ninguno de los investigados conociera que el marido de Oltra era la persona sospechosa de los abusos.

Icardi se vio obligada a pedir un crédito para aportar los 6.000 euros con los que debía indemnizar a la menor. Pretendía, con este adelanto, beneficiarse de una atenuante de reparación del daño y ver aligerada la pena. No fue apreciado por el tribunal.

Hoy en día sigue sin encontrar trabajo. Él tiene asumido que incluso en el caso de ser absuelto nadie le va a contratar con semejantes antecedentes. Está formándose, a través de diferentes cursos, para buscar alternativas a su carrera profesional. Ahora mismo cobra el paro, la única fuente de ingresos que recibe. Pasa mucho tiempo con su familia, los hijos de su matrimonio con Oltra, según fuentes de su entorno.

Su situación económica no es boyante, ni mucho menos. Más bien todo lo contrario y con más motivo tras el alza de precios. La indemnización por despido fue un balón de oxígeno, alrededor de 28.000 euros, pero no es una cantidad que vaya a durar indefinidamente. Aquella indemnización se acordó después de que un juez considerara nulo el despido que habían efectuado desde el centro del Niño Jesús. El despido se produjo tras la segunda sentencia condenatoria pese a que no era firme. La situación, en realidad, era idéntica a la del primer fallo, pero entonces siguió trabajando, en otras dependencias alejadas de los menores tutelados, sin mayores problemas. El cambio de criterio de la dirección de las instalaciones resulta todavía hoy incomprensible.