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JC. F. M.
Jueves, 27 de junio 2019, 00:58
valencia. La constitución del nuevo Ayuntamiento de Valencia el pasado 15 de junio puso punto y final a la trayectoria como concejal de Beatriz Simón y Berto Jaramillo, además de a las de otros muchos ediles de la pasada corporación municipal. A la exedil del PP y el que fuera concejal de Valencia en Comú les une una característica muy concreta: ambos son miembros de la Diputación de Valencia. Y lo son -en presente- porque la corporación provincial no se constituye hasta el próximo 20 de julio, como consecuencia del contencioso electoral presentado por Compromís en la localidad de Bonrepós.
Simón y Jaramillo no cobraban su nómina de la Diputación. Ambos percibían su remuneración del consistorio valenciano -con unos emolumentos sensiblemente superiores a los de la corporación- y recibían del organismo que preside Toni Gaspar una cantidad en concepto de asistencia a plenos y comisiones. La retribución municipal se prolongó, tanto para Simón como para Jaramillo, hasta la finalización del anterior mandato. Un concejal del consistorio percibe 72.691 euros al año en 14 pagas si pertenece al equipo de gobierno. Y 66.945 euros si forma parte de la oposición.
¿Y desde el día 15 de junio? Simón y Jaramillo tienen desde esa fecha otra circunstancia en común. Los dos exconcejales se dirigieron de inmediato a la corporación provincial para solicitar la dedicación exclusiva a la corporación provincial, la única administración pública de la que forman parte en la actualidad, para solicitar el régimen de dedicación exclusiva. Traducido: que a la vista de haber finalizado su mandato -y su sueldo- del Ayuntamiento de Valencia, decidieron pasar a cobrar de la Diputación.
La solicitud resulta llamativa porque, en ambos casos, se trata de diputados provinciales que vienen de ejercer su labor -y cobrar- como concejales del Ayuntamiento y ahora, para un mes escaso de 'actividad' en la Diputación de Valencia, solicitan que se les pague desde esta institución.
En el caso de Jaramillo, como miembro del equipo de gobierno, y con base al acuerdo plenario adoptado en junio de 2015, su remuneración será de 4.775,87 euros mensuales. Para la popular Beatriz Simón la nómina mensual se queda en 3.581,91 euros. La solicitud de Jaramillo se formalizó el propio 15 de junio, el mismo día que se constituyeron los nuevos ayuntamientos -también el de Valencia-, mientras que la de Simón es del día 17, el primer lunes después de esa circunstancia. Ni uno ni otro dejaron pasar, por lo tanto, demasiadas jornadas sin disponer de un sueldo público.
Los dos exconcejales se han encontrado con una circunstancia clave que les ha permitido acceder a esta retribución. La salida de Rosa Pérez y Mamen Peris de la corporación provincial dejaba vacantes dos plazas de diputado en régimen de dedicación exclusiva, que son las que ahora ocupan Simón y Jaramillo.
La exconcejal del PP se encuentra investigada por el caso Taula y su horizonte político parece acabado. Jaramillo tampoco sigue en el consistorio tras salir derrotado en las primarias para liderar el partido en la ciudad.
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