Los expertos achacan la deuda a la infrafinanciación sin dar importancia a la corrupción

«La propuesta ya se ha hecho en Portugal o en la Asamblea de Madrid. En Madrid ha permitido destapar varios escándalos de corrupción del PP. Queremos conocer el stock de deuda pública, los efectos de la infrafinanciación en la deuda pública, la factura de la corrupción en la deuda pública y las políticas de austeridad en la deuda pública», señaló Ferran Martínez hace dos años y medio cuando presentó su propuesta para crear una comisión en la Cámara. Es la única investigación que esta legislatura acomete Les Corts. Sin embargo, tras la comparecencia de los tres primeros expertos, el asunto de la corrupción y las políticas de austeridad han perdido protagonismo. Los economistas han apuntado hacia la descompensación entre los ingresos y el gasto, entre las competencias adquiridas por la Generalitat desde los años 80 y en la falta de recursos recibidos por el Estado para explicar gran parte de los números rojos de la Comunitat.

En la sesión parlamentaria han comparecido Víctor Fuentes, profesor de Economía Aplicada Valenciana de la Universitat de Valencia, y exdiputado socialista en Les Corts entre 1983 y 1999. Posteriormente ha ofrecido su opinión Francisco Pérez, director de l'Institut Valencià d'Investigacions Econòmiques (IVIE), uno de los puntales en la generación de los informes que la Comunitat emplea para defender sus tesis sobre la necesidad de mejorar la financiación. Finalmente, Ángel de la Fuente, director del comité científico de la fundación Fedea y uno de los expertos en materia de financiación del Ministerio de Hacienda cuando lo dirigía Cristóbal Montoro (PP).

Fuentes y Pérez han recalcado el desequilibrio que supuso para la Generalitat que en los años 80 se asumieran las competencias en materia de Educación y Sanidad sin que eso se compensara de la manera correcta con una mejora en la transferencia de recursos por parte del Estado. A partir de ahí empezó a generarse deuda. Además, según ha explicado Fuentes, el cálculo inicial se realizó por parte del Gobierno central en función de la idea de que la situación educativa y sanitaria, en cuanto a recursos, era más o menos similar en todo el Estado. Sin embargo, la Comunitat sufría unas carencias que la Generalitat tuvo que intentar solucionar con un dinero que pronto se comprobó como insuficiente. De ahí el 'pecado original', la generación de una deuda que, al no mejorarse las transferencias de recursos de manera sustancial, fue engordando cada vez más y más. Y más. De tal modo, según ha recordado Pérez, que en los balances contables se han ido acumulando números negativos. Así, en 2007 la deuda era de 11.900 millones de euros; seis años después (en lo más duro de la crisis económica) se había disparado a 32.000; en 2015 escaló hasta los 42.000, y ahora estamos por encima de los 52.000 millones.

La cuestión de la corrupción apenas apareció en las comparecencias. Pérez hizo una especie de reparto del porqué de la deuda. No dejó mucho espacio para el debate político. El experto del IVIE tribuyó los números rojos a la infrafinanciación y al modo en que el ciclo económico global (el nacional y el internacional) han influido en la economía de la Comunitat. Sin margen para la «factura de la corrupción». En este sentido, De la Fuente fue más lejos. El economista de Fedea consideró que la deuda no es un problema vinculado a corrupción, sino de creer que se puede gastar más de lo que se tiene porque el Estado te rescatará.

De la Fuente, además, se mostró reticente a la condonación de la deuda, algo que consideraron posible los otros dos economistas. En el caso de Victor Fuentes, resaltó que, de la deuda establecida en 2007, cerca del 25% era con acreedores externos, mientras que actualmente ese porcentaje se ha reducido notablemente hasta el 5% del total, ya que la Comunitat tiene al Estado como su principal acreedor.

Respecto a cómo solucionar el problema, los técnicos han advertido que será necesaria la voluntad política de todos. Pérez, en este sentido, ha lamentado la tendencia a retrasar el abordaje de soluciones, porque mientras siga el asunto pendiente no habrá modo de impedir que siga agravándose. Pérez y Fuentes insistieron en la necesidad de renovar el actual sistema de financiación. En cualquier caso, Pérez ha admitido que «gestionar con más eficacia debería ser posible». En cualquier caso, ante la coincidencia de la mayoría de los diputados achacando a la mala financiación la galopante deuda de la Comunitat, De la Fuente advirtió, en cualquier caso, que él considera que la Generalitat se siente más infrafinanciada de lo que, en su opinión, está.