Para Alberto Núñez Feijóo, el anuncio del jefe del Ejecutivo de que llamará a la oposición, salvo a Vox, el jueves que viene para informar ... sobre Ucrania llega tarde. Defiende que Pedro Sánchez debería haberles informado antes del Consejo Europeo extraordinario de hoy porque no tiene mayoría parlamentaria para asumir compromisos internacionales. También reprocha al líder socialista su decisión de orillar en ese ronda de contactos a la formación de Santiago Abascal. «Se llama a todas las fuerzas políticas, salvo a la tercera. Me sorprende este 'apartheid' que quiere hacer el presidente», censuró el líder del PP desde Bruselas tras asistir a la cumbre con sus homólogos europeos.
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En el entorno de Feijóo consideran una «falta de respeto y sensibilidad» que el presidente enmarque en esa ronda de contactos al jefe de la oposición con, entre otros, la portavoz parlamentaria de EH Bildu y remarcan que pese a las «muchas diferencias» que hay con Vox, más centrada en hacer oposición al PP que a Sánchez, el líder conservador no apartaría a la tercera fuerza política del país. «Mi cordón sanitario será a uno de los socios de Sánchez: Bildu», apuntó Feijóo en redes sociales.
Tras días quejándose de una llamada que no llega, el jefe de la oposición restó importancia a la iniciativa de Sánchez, con quien no habla desde la reunión preparatoria de la sesión de investidura de noviembre de 2023. «No sé en qué consiste ese contacto», dijo a preguntas de los periodistas, recalcando que el aumento de gasto en defensa y el resto de compromisos que se adquieran deben de ser debatidos previamente en el Congreso.
El líder de los populares incidió en que mientras los grandes líderes europeos están explicando a sus ciudadanos la gravedad de la situación bélica, Sánchez no lo ha hecho en ninguna ocasión. Por lo que urgió al presidente a ponerle remedio y explicar cuanto antes en las Cortes –Sánchez tiene previsto hacerlo a finales de este mes– cuál es la posición del Gobierno, sus compromisos, el incremento del gasto en defensa «a asumir» y en qué condiciones. Los conservadores están convencidos de que su rival socialista no va a tener fácil lograr los apoyos entre sus socios habituales, con claras posiciones antibelicistas, porque tampoco tiene el respaldo de su Gobierno, en referencia a la diferente visión de Sumar y el PSOE sobre el aumento del presupuesto en materia defensiva.
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Feijóo se reunió en Bruselas con el futuro canciller de Alemania, Friedrich Merz; con el presidente del PPE, Manfred Weber; y con el ministro de Exteriores de Italia, Antonio Tajani, con el objetivo de afrontar «uno de los mayores desafíos existenciales desde la constitución de la Unión Europea», en pleno debate sobre el envío de tropas a Ucrania y el aumento del gasto militar. En este contexto, el líder de la oposición planteó la necesidad de que la UE ejerza su liderazgo en el panorama mundial con «determinación» y cumpla los compromisos con la OTAN, al tiempo que reclamó una paz justa para Ucrania y recordó que el país agresor es Rusia.
Feijóo abogó también por mantener la alianza estratégica con Estados Unidos, aunque reconoció estar «preocupado» por la posibilidad de una guerra arancelaria que puede tener graves consecuencias, entre otros, para el sector del campo español.
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