Hacienda elabora nuevas instrucciones para ordenar el gasto del presupuesto

El Consell del Botánico dio luz verde el pasado verano a un decreto de 'regulación del procedimiento de gestión del presupuesto de la Generalitat', una norma que renovaba las reglas de gestión de los capítulos de gasto de las cuentas autonómicas -justo en pleno debate respecto a que el incremento de gastos en las cuentas de la Generalitat no ha venido acompañada del consiguiente incremento de ingresos- y desarrollaba además el 'alcance de la memoria económica a que se refiere el artículo 26 de la Ley 1/2015'.

¿Qué es esa memoria económica? El citado artículo 26 señala que, de manera previa a la autorización de cualquier disposición legal, Hacienda debe 'emitir un informe, de carácter preceptivo y vinculante, respecto a su adecuación a las disponibilidades presupuestarias y a los límites de los escenarios presupuestarios plurianuales'. Es decir, asegurarse de que existe dinero en caja como para llevarlo a cabo. Y para ello, el expediente debe incorporar una memoria económica 'en la que se detallen las repercusiones presupuestarias derivadas de su ejecución, tanto a nivel de financiación como de gastos' de esa norma.

En el decreto del pasado julio ya se advertía de que, en todo caso, la regulación de las memorias permitiría disponer, ex ante -con anterioridad-, de una evaluación del impacto económico financiero de las propuestas normativas, para determinar su incidencia tanto sobre el presupuesto en vigor como sobre presupuestos futuros. Es decir, una herramienta destinada a conocer el gasto que generaría cada una de esas normas antes de aprobarlo. Ayer, el Diari Oficial (DOGV) publicó la resolución por la que la dirección general de Presupuestos dicta las instrucciones de desarrollo de esas memorias económicas.

La principal novedad de la norma pasa por la incorporación de unas 'fichas de impacto presupuestario' -recogidas ya como obligatorias en el decreto de regulación del presupuesto- y que permitirán «ordenar y evaluar mejor la gestión para evaluar el impacto presupuestario de cada medida», según señalaron ayer fuentes del departamento que dirige Vicent Soler. Las citadas fichas complementarán la memoria económica que consellerias y sector público remiten a Hacienda, facilitando así el seguimiento y análisis de cada gasto.

Las mencionadas fichas incluyen referencia de la sección del presupuesto afectada así como el número de expedientes tramitados por esa sección. También se consigna la descripción o denominación de la medida, acto o norma a que se refiera el expediente. En el apartado «Impacto económico», se detalla en el decreto, se marcará la casilla correspondiente según se trate de una medida de ingreso o de gasto, indicando si se trata de una medida transitoria o permanente.

En la ficha detalle se consignarán los datos relativos a las aplicaciones presupuestarias afectadas por la medida y la columna «Incremento anual» de cada uno de los ejercicios a los que se extienda la ejecución de la medida. El resto de campos se autocumplimentarán con los datos incluidos en las casillas correspondientes.

Además, en el apartado 'fuentes de financiación' se indicará si la medida se financia con cargo a fondos propios o si se financia, además, con fondos finalistas procedentes de otras administraciones públicas. En este caso, se deberá concretar de qué fondo se trata y el porcentaje de financiación que corresponde a cada una de las administraciones intervinientes. En caso de que la actuación se realice únicamente con fondos propios, se consignará en la casilla correspondiente «100 %» y se detallará la forma de financiación.

Hacienda trata de esta manera de simplificar la identificación en cada memoria económica de los datos relativos a la financiación de cada norma adoptada. De hecho, las fuentes consultadas por este diario señalaron ayer que la trascendencia de la norma radica en el hecho de que significa que la conselleria de Hacienda avanza en la exigencia de esas memorias económicas necesarias para conocer el impacto financiero de una medida antes de su aprobación.

Por otro lado, la conselleria de Hacienda explico ayer que los datos de la tesorería de la Generalitat correspondientes al mes de diciembre de 2019 no se corresponden con la ejecución real del presupuesto. De ese ejercicio. El departamento que dirige Soler admitió que los pagos en los capítulos inversores en 2019 habían sido inferiores a los de 2018, e incluso que el porcentaje de gasto comprometido, sobre el total, también había descendido respecto al ejercicio anterior. No obstante, aseguró que, en términos absolutos, la inversión habría crecido 144 millones de euros.