El hijo de Carlos Fabra declara que contrató a su madre para que pudiera cobrar la jubilación

El supuesto entramado empresarial y financiero que dirigía Carlos Fabra para manejar su patrimonio muestra una telaraña de sociedades, préstamos, facturas por servicios ficticios e incluso el pago de nóminas. El juez de Instrucción 4 de Castellón detalla en un extenso auto las principales operaciones sospechas que han salpicado a cerca de una veintena de empresarios.

Una de ellas está relacionada con Borja Fabra, hijo del político castellonense, y administrador de Sipcas, otra de las sociedades en el punto de mira de la Justicia. La mercantil transfirió algo más de 12.000 euros a María Desamparados Fernández, la mujer de Fabra. El administrador indicó al juez que a su madre le faltaban «unos meses» para poder cobrar la jubilación y por eso decidió contratarla en su empresa. Sin embargo, en la Seguridad Social sólo consta otra empleada dada de alta en esta mercantil. No es tampoco la única empresa de la que supuestamente recibía una nómina. También obtuvo ingresos por este concepto de la firma Carmacas, en manos de Claudia Fabra, otra hija del matrimonio. En este caso sí estaba dada de alta (2004-2008). Cobró 24.658 euros por su trabajo de febrero de 2007 a julio de 2008. Pero el juez sospecha de la verdadera ocupación de la esposa. De hecho, quiere interrogar a la hija sobre este particular.

También llama la atención el pago de 58.000 euros del PP de Castellón a la empresa Asdecas SL, controlada por Carlos Fabra. Las facturas que la mercantil pasó a la formación política tienen como concepto «trabajos y asesoramientos en temas de seguridad del PP y sus miembros». No consta que la firma del ex cargo popular se dedicara a estos asuntos tan delicados. También desde esta mercantil parten numerosas transferencias, otra vez con el concepto nómina, a la cuenta de la esposa de Fabra. En total, de esta sociedad recibió 180.000 euros de una supuesta retribución.

El estudio de las cuentas depara otro detalle relevante. El 99,71% de los fondos de esta mercantil fueron aportaciones en efectivo del expresidente, su entorno e incluso de la cuenta del PP. Luego se justificaban como nóminas de Desamparados Fernández, esposa de Fabra, pero que, al final, acababan revertiendo en el político del PP, sostiene el auto.

El juez citará ahora a una veintena de empresarios, tal y como ha informado LAS PROVINCIAS, para que aclaren las sospechosas operativas que desarrollaron, como créditos a fondo perdido, a favor del político popular.