Dicen los que transitan la calle Palau, donde la Conselleria de Hacienda tiene su sede, que en las últimas semanas se ha instalado allí una nube de decaimiento, aderezada en algunos instantes, hasta con alguna lágrima, en las horas previas al cierre del acuerdo ... político que este año ha llegado más allá de la bocina. El departamento que dirige Vicent Soler ha sido despojado de una de sus principales misiones del año, la de decidir, cuadrar y elaborar los presupuestos de la Generalitat para 2022 y, en su lugar, se ha nombrado una comisión con altos cargos de todo color y área, para llevar a cabo ese rompecabezas de ingresos y gastos junto con la directora general de presupuestos, Eva Martínez. Pero, este año, ni rastro del conseller.
Publicidad
Soler atraviesa estos días sus horas más bajas al frente de Hacienda, fruto de los derroteros que han tomado unas cuentas que por primera vez en el Botánico no se aprueban ni en tiempo ni en forma, como le gustaba presumir al también catedrático de economía. De hecho, «ni con buenas formas», según reconocen desde su entorno. Algo que ha dejado al conseller «tocado» por cómo se ha desarrollado este año una negociación en la que hasta la fecha, siempre se había implicado. Sin embargo, en esta ocasión, según señalan fuentes del Consell, el conseller ha quedado al margen para no ser un inconveniente en la negociación, tras las tensiones que viene viviendo en anteriores episodios con la vicepresidenta de la Generalita, Mónica Oltra. Esa labor la ha asumido una comisión política formada por seis cargos (dos por PSPV, dos por Compromís y dos por Unidas Podemos) que se han sentado directamente a la mesa con la responsable de presupuestos. El papel de Soler no ha sido como otros años. Y no lo ha sido porque, por ejemplo, el responsable de Hacienda intentó sentarse con los dos vicepresidentes, Mónica Oltra y Héctor Illueca, para visibilizar que tomaba las riendas de la negociación, a principios de octubre, y acabó plantado por la vicepresidenta, que se negó a llevar el acuerdo como una cuestión de Hacienda con las partes. De hecho, Oltra llegó a plantear la elaboración del presupuesto como un asunto de todo el Consell y afeó al conseller sus modos de otros años. «No me dice: 'así' y yo obedezco como si fuera una niña. Yo soy la vicepresidenta y represento a una parte importante del Gobierno, que es Compromís», llegó a decir.
Después, con la composición de la comisión que ha acabado aprobando las cuentas, Soler también ha permanecido en un segundo plano. El conseller no se ha pronunciado sobre el acuerdo ni tan siquiera en sus redes ni a través de los canales oficiales de la Generalitat, y a pesar del barullo de estas últimas horas, tampoco ha modificado su agenda de actos. Él será quien deberá llevar el anteproyecto de presupuestos al pleno extraordinario que se celebrará mañana. Sin embargo, no ha sido uno de los muñidores del acuerdo este año. Soler también es el encargado de detallar las partidas a los medios, pero Oltra ya se ha paseado este fin de semana por teles nacionales para explicitar el acuerdo en el que su formación, Compromís, ha marcado los tiempos.
En el Consell no son pocos los que piensan que el conseller de Hacienda está amortizado, sin embargo, el responsable de las finanzas encuentra en el Palau a sus principales defensores. Eso, a pesar de que su nombre siempre suena en todas las quinielas de remodelaciones que nunca llegan a término. Aunque el presidente de la Generalitat sostuvo hace poco edn una entrevista con este diario que tenía en la cabeza hacer cambios en el Consell, siempre que se llevaran a cabo en todo el Gobierno (en referencia a que igual es necesario tocar alguna conselleria de Compromís) lo cierto es que el de Soler no parece ser uno de ellos. Puig tiene absoluta confianza en su titular de Hacienda, al que ha confiado la labor de ser el conseller de Hacienda con el que se cambiará la financiación de la Comunitat. Un área en la que, aseguran desde el entorno socialista, sigue volcado, a pesar de los lentos pasos del Gobierno. Pero, los socios creen que su momento «ha pasado» y es hora de dar paso a un nuevo impulso en las políticas financieras del Botánico.
Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.