Ibáñez, ante la crisis en el partido de Oltra: «Hay intereses personales en las salidas»

Alberto Ibáñez, diputado de Sumar y portavoz de Iniciativa, el partido de Mónica Oltra, tiene un pequeño incendio en la formación, una de las tres patas que conforman Compromís. Este pasado sábado, durante el acto de Yolanda Díaz, subió al escenario de una sala del Palau de Les Arts para criticar al gobierno del PP.

De su partido, en cambio, no hizo alusión ni directa ni indirecta. La profesión va por dentro, que se suele decir. Pero no parece que la salida de cargos representativos del partido –entre ellos el vicealcalde Sergi Campillo o la edil Luisa Notario entre cerca de una decena de dirigentes– le inquiete. Más bien todo lo contrario. Incluso saca pecho y arremete contra los díscolos.

Ibáñez atendió a los medios de comunicación al terminar el evento. Algo que, por otra parte, suele hacer con frecuencia. «Tenemos un proceso abierto que dice que de febrero a octubre elegiremos en una asamblea general cómo avanzamos en la relación con Compromís», recordó. Y lanzó un mensaje a los críticos: «Está muy mal hablar en prensa de los problemas internos. Nosotros vamos a ser coherentes y quien no lo sea que lo explique».

El dirigente no ha querido confirmar si tenía o no conocimiento de ese malestar en su partido. Se limitó a dar otra información: «Lo que yo digo es que el 85 por ciento de la militancia aprobó el documento en una mesa nacional septiembre. Si una parte muy minoritaria de la militancia no se siente representada...». Y eso pese a que Campillo no es una persona más en la formación. Pero Ibáñez no quiso admitir ese rango. «En Iniciativa todas las personas valen lo mismo».

Hay quien ha criticado su personalismo. «¿Pero qué personalismo estoy cogiendo», contestó algo retador. «Es importante tener respeto por las decisiones que se toman en el partido. Yo gané unas primarias. En la vida hay que abrir la ventana y ver si llueve», en referencia a ser consciente de la decisión de la dirigencia.

«Ese proceso entendemos -continúa Ibáñez- que después del mal resultado de las elecciones, también municipales, conviene hacer autocrítica de por qué hemos perdido. Se trata de saber por qué Compromis «no ha podido interpelar a esa parte de la gente» y tras ese razonamiento entienden que «Compromís no puede ser una suma de voluntades. Si ahora hay personas que tienen intereses personales, los han de explicar. Nosotros seguimos la hoja de ruta». No quiso entrar en cuál es el tipo de interés que alberga Campillo.

Hasta este sábado eran cinco bajas, según los datos de Ibáñez. Pero ante esta oleada de abandonos, el portavoz quiso destacar que desde el último congreso de 2022 a este momento «hay más de medio millar de nuevos simpatizantes y afiliados». «Se tendrá que mirar eso de los personalismos», dijo para sacudirse las críticas sobre su modo de dirigir el partido, junto a la exvicepresidenta Aitana Mas.

El concejal del Ayuntamiento de Valencia Sergi Campillo, uno de los rostros más destacados del partido y de Compromís en el Consistorio, remitió una dura carta a la dirección de IPV para explicar su marcha. «No hay cuidado, no hay escucha, no hay diálogo, no hay participación y cuando gente de peso dice o sugiere que se va nadie les llama a hablar con ellos», señala una fuente de Compromís

Entre las personas que han tomado la misma decisión figura la exconcejala Luisa Notario, según confirmó Campillo a Europa Press. El ex director general de Igualdad en la que fuera conselleria de Oltra, José de Lamo, también ha presentado su baja como militante de IPV.

El partido fundado por Mónica Oltra y Pasqual Mollà vive horas bajas. Muy bajas. La salida forzada de la exvicepresidenta por sus problemas judiciales, una renovación en la dirección del partido que abrió heridas nunca cerradas y la derrota electoral han desprovisto a la dirección del partido, encabezada por Mas e Ibáñez, del apoyo interno de otras épocas. Sólo un hipotético regreso de la exvicepresidenta, el mejor activo electoral del partido y todavía de Compromís, podría revitalizar la organización. Pero los tiempos judiciales por el momento no permiten pensar todavía en esa oportunidad.

Mientras tampoco Compromís pasa por una etapa de esplendor. La salida del Gobierno les dejó en cierto estado de shock. El PSPV ha reaccionado de manera más rápida y efectiva, mientras que la formación que ahora lidera Joan Baldoví no acaba de coger el pulso a la nueva situación.

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