El juez archiva la causa al testaferro de Benavent por el pago de comisiones para adjudicaciones en La Mostra

La pieza E es otra más de las investigaciones derivadas de los audios de Benavent. Aquí se analizaba el cobro de comisiones en obras del Ayuntamiento de Valencia en la época de la exconcejal de Cultura, María José Alcón. Se trata de la rehabilitación de las torres de Quart, de varios puentes de Valencia y de la construcción y explotación del centro Cultural La Rambleta. También de algunos contratos para la Mostra de Valencia. En el origen también se analizó la adjudicación de La Rambleta, aunque esto quedó archivado en las primeras fases de las diligencias.

El juez modifica su auto de procesamiento y deja fuera a Barat. Reconoce que la imputación de Benavent es «insegura e inconcluyente» porque atribuye el pago de la comisión a este empresario -fue su socio en la sombra en la empresa Thematica, otro de los juicios ya celebrados- o a la administradora de la empresa Begamir, adjudicataria del servicio de la Mostra. Pero, además, en los audios de este caso no se llegan a reconocer los hechos supuestamente delictivos «sino de actos meramente de preparación» de los servicios.

No son suficientes las grabaciones de Benavent a la exconcejal María José Alcón -mujer de Alfonso Grau y que se suicidó durante la instrucción de la causa- para sostener la imputación de Barat. Y menos en ese año, el 2006, cuando la empresa de este empresario no recibió ninguna adjudicación.

También descarta que se pueda incorporar como un indicio en esta causa la relación de amistad y empresarial que ambos mantuvieron unos años antes y que en el juicio de Thematica se dio como delictiva. De hecho, la Audiencia condenó a Barat a más de nueve años de cárcel por el conocido como Bibliobus y el desvío de fondos de una montaje en el MuVim.

Los empresarios investigados por el pago de comisiones a cambio de adjudicaciones en el festival de cine de La Mostra coincidieron en 2016 en negarlo todo ante el juez: no han dado dinero a cambio de obtener obras.

Enrique Aleixandre, de la firma Universo Selección, admitió que el exgerente de Imelsa Marcos Benavent contactó con él una vez había obtenido el servicio. «Te lo han dado gracias a mí», recuerdaba que le dijo. «A ver cómo te portas», añadió. El declarante, siempre según su testimonio, le colgó el teléfono de inmediato.

El relato de Belén García también siguió la misma línea de rechazar las acusaciones. Pero, además, aportó detalles biográficos de Benavent sin ningún interés para la causa. Por ejemplo, le anunció que se iba a casar, aunque lo «hacía por dinero». Su suegro Mariano López, el que posteriormente entregó las cintas a la diputada de EU, Rosa Pérez, para que denunciara el caso, llegó a ser el presidente de los empresarios de la comarca. En unos días afronta el juicio por el caso del call center.

A juicio de los investigadores, en su día resultaron llamativos los vínculos personales o el hecho de que estos empresarios conocieran a Benavent y Vicente Burgos, exgerente de la Fundación Jaume II El Just y exmarido de la concejala responsable de las adjudicaciones, María José Alcón, también investigada en la causa, dado que ni uno ni otro tenían vínculos laborales con el consistorio.