Mazón aprobará sin votos en contra los presupuestos de la Diputación

Primero fue el acuerdo con Compromís. Y ayer le tocó el turno al PSPV. El presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, se garantizó ayer que los presupuestos de la corporación provincial para 2021 saldrán adelante sin votos en contra. Tras una reunión con el portavoz socialista Toni Francés, el equipo de gobierno confirmó el acuerdo para que ese partido se abstenga en el pleno del próximo día 30. Una abstención que, según los populares y Cs, aún podría convertirse incluso en voto favorable. De cumplirse esta previsión, Mazón se convertirá en el primer presidente de la Diputación de Alicante en los últimos once años que logra sacar adelante sin votos en contra las cuentas provinciales.

La Comisión de Hacienda, convocada ayer por la mañana, dio el visto bueno al presupuesto general consolidado de la Diputación, con la abstención tanto de los socialistas como de Compromís. El documento para el próximo año sigue una línea estratégica de apoyo y asistencia a los 141 municipios de la provincia, especialmente a los de menor población, para atender y cubrir sus necesidades sociales y económicas derivadas de la gestión de la crisis del Covid. Mazón destacó el esfuerzo que se está realizando desde la institución provincial para sacar adelante estas cuentas sin votos en contra. «Es el momento de grandes acuerdos, no de más discusiones entre políticos ni de dar más problemas a los ciudadanos», concretó Mazón, quien avanzó que desde el equipo de Gobierno «estamos haciendo un esfuerzo por integrar las propuestas de todos los grupos políticos. Por parte de Compromís ya tenemos su abstención y hoy (por ayer) en la Comisión de Hacienda el Grupo Socialista ha hecho lo propio».

Aprobar los presupuestos de la corporación provincial sin votos en contra constituye un éxito político para el líder de los populares alicantinos, que demuestra su capacidad para llegar a acuerdos. Con un pacto de gobierno con Ciudadanos bien engrasado, y con capacidad de diálogo para llegar a acuerdos con los grupos de la oposición, el dirigente popular logra lo que no consiguió ayer el Botánico, que tuvo los votos en contra de PP y Vox en la votación de los presupuestos de la Generalitat para 2021. Y consigue también lo que muy probablemente tampoco conseguirán ni la Diputación de Valencia ni la de Castellón, que previsiblemente tendrán votos en contra para sacar adelante sus cuentas, igual que los equipos de gobierno de las tres capitales de provincia.

La presidenta del PP valenciano, Isabel Bonig, se refirió el pasado lunes a Ciudadanos como un «grupo en extinción». Las palabras de la líder popular –en alusión a la estrategia del partido de Toni Cantó en relación con los presupuestos del Botánico– contrastan con la actitud de entendimiento que el líder del PP alicantino, Carlos Mazón, muestra hacia Cs, formación con la que gobierna la corporación provincial y a la que dedica guiños con cierta frecuencia. El presidente de la Diputación exhibe una complicidad con sus socios que se sitúa en las antípodas de la posición mostrada al menos esta semana por la presidenta regional, y que algunos dirigentes populares consideraron poco oportunas.